Desde este verano (2016) las cosas han cambiado mucho a la hora de ir a la Quinta con los perros. Ya han puesto varias multas, y es que dentro del recinto no permiten perros sueltos ni siquiera en el horario de la ordenanza municipal, ya que se rigen por las normas del propio parque. Se han recogido firmas, pero nadie sabe a ciencia cierta qué es lo que ha pasado para este cambio de actitud (antes se toleraba). Hoy, que hace un día estupendo, he ido y estaba vacío. Normal, los que vamos a la Quinta regularmente somos los que tenemos perros, el resto es gente que vive por la zona, mayor o con el carrito de bebé, o cuando afloran los almendros (3 fines de semana) para hacerse la foto e irse. Ah, y los que van a correr Dicen que si la culpa es de la nueva concejala, o que si en el palacio, que lleva vacío no sé cuántos años, quieren hacer algo (¿yy???), o que los que corren por el parque se han cabreado, no lo sé... las pistas para correr están al lado, unas pistas que el Ayuntamiento tiene su disposicion, pero no, no les vale porque se les cargan las articulaciones y es mejor dar 3 pasos más y meterse a crear bulla en la Quinta con la gente que está caminando tranquilamente con su perro. Ha habido días de coches de policía entrando por cada puerta para acotar, hasta policía a caballo, no me fastidies... menos mal que somos una ciudad moderna y que podemos viajar en el último vagón del metro a unas horas determinadas con nuestros perros amarrados como Hannibal Lecter.
Es el parque favorito de Homer. Una pena que en ocasiones la falta de civismo enturbie nuestros paseos. Un poco más de responsabilidad por parte de quienes llevan a sus perros sueltos sin prestar atención a lo que hacen. La libertad de unos no debe coartar la de otros. A pesar de esto nos encanta, es un parque precioso y tranquilo, sobre todo entre semana.
Es una pena, entre unos y otros y por la falta de civismo de algunos nos han hecho la vida imposible en el parque a los que sí respetamos la naturaleza, recogemos cacas de nuestros perretes, controlamos a los perretes y no atropellamos con bicicletas a perros ni a viejecitas ni a niños, no utilizamos el parque como pista de carreras (hay una al lado, pero no, mire usted) no tiramos animalitos acuáticos al estanque, no nos llevamos los esquejes de las plantas, ni nos llevamos ramos de flores a casa, ni vareamos los almendros para llevarnos a casa las almendras, no pisamos los lirios ni gladiolus, no meamos contra la paredes, no defecamos en los rincones (es que no hay W.C.s en el parque, mire usted), no celebramos grandes fiestas de cumpleaños al aire libre y dejamos desperdicios y basura allá donde de la gana tirarla, en vez de utilizar las papeleras, no hacemos botellones los fines de semana y dejamos botellas rotas con las que se cortan personas y animales...... etc, etc.... . Lo que hace falta es más vigilancia para que quien se comporta como "Dios manda" pueda disfrutar y para quien no sabe "estar ni comportarse" sea corregido, amonestado o invitado a irse del parque y sino pues entonces si una pedazo multa que le quite las ganas de volver a comportarse irrespetuosamente hacia todo lo que supone una zona de recreo para TODOS que debe mantenerse por TODOS.
Desde este verano (2016) las cosas han cambiado mucho a la hora de ir a la Quinta con los perros. Ya han puesto varias multas, y es que dentro del recinto no permiten perros sueltos ni siquiera en el horario de la ordenanza municipal, ya que se rigen por las normas del propio parque. Se han recogido firmas, pero nadie sabe a ciencia cierta qué es lo que ha pasado para este cambio de actitud (antes se toleraba). Hoy, que hace un día estupendo, he ido y estaba vacío. Normal, los que vamos a la Quinta regularmente somos los que tenemos perros, el resto es gente que vive por la zona, mayor o con el carrito de bebé, o cuando afloran los almendros (3 fines de semana) para hacerse la foto e irse. Ah, y los que van a correr Dicen que si la culpa es de la nueva concejala, o que si en el palacio, que lleva vacío no sé cuántos años, quieren hacer algo (¿yy???), o que los que corren por el parque se han cabreado, no lo sé... las pistas para correr están al lado, unas pistas que el Ayuntamiento tiene su disposicion, pero no, no les vale porque se les cargan las articulaciones y es mejor dar 3 pasos más y meterse a crear bulla en la Quinta con la gente que está caminando tranquilamente con su perro. Ha habido días de coches de policía entrando por cada puerta para acotar, hasta policía a caballo, no me fastidies... menos mal que somos una ciudad moderna y que podemos viajar en el último vagón del metro a unas horas determinadas con nuestros perros amarrados como Hannibal Lecter.