Descubrimos este restaurante gracias a esa página, buscando un restaurante donde se pudiera comer con nuestra perrita durante la ola de calor que asola Madrid. Confirmamos por teléfono que no habría ningún problema y allí fuimos. Trato excepcional por parte del personal, fueron encantadores con nosotros y nuestra perrita (a la que pusieron un bebedero con agua fresquita que agradeció mucho), nos pusieron en una zona más tranquila del restaurante porque además también íbamos con un carrito de bebé. Probamos el menú del día, 12,50€, todo muy rico, el café 1,50€ y nos invitaron a un chupito. Sencillamente genial, seguro que volvemos y ya lo hemos recomendado a todos nuestros amigos amantes de los perros. Ojalá muchos restaurantes aprendan y vivamos en una ciudad más amigable con nuestras mascotas.
Descubrimos este restaurante gracias a esa página, buscando un restaurante donde se pudiera comer con nuestra perrita durante la ola de calor que asola Madrid. Confirmamos por teléfono que no habría ningún problema y allí fuimos. Trato excepcional por parte del personal, fueron encantadores con nosotros y nuestra perrita (a la que pusieron un bebedero con agua fresquita que agradeció mucho), nos pusieron en una zona más tranquila del restaurante porque además también íbamos con un carrito de bebé. Probamos el menú del día, 12,50€, todo muy rico, el café 1,50€ y nos invitaron a un chupito. Sencillamente genial, seguro que volvemos y ya lo hemos recomendado a todos nuestros amigos amantes de los perros. Ojalá muchos restaurantes aprendan y vivamos en una ciudad más amigable con nuestras mascotas.
Hemos ido varias veces a comer y es un sitio completamente perruno. Agua para Pipa e incluso un día algo de picar. Te atienden con mucha amabilidad y todo está buenísimo. El menú de mediodía entre semana se cuida con esmero. Da gusto encontrar sitios donde nos tratan tan bien. Gracias.