Esta maravillosa ruta es un auténtico deleite para los sentidos humanos y caninos. Se trata de un sendero en el que caminaremos paralelos al Río Barosa, y podremos disfrutar de las aguas más cristalinas de la Sierra de Cazorla. Los baños son un espectáculo, concretamente no podéis dejar de daros un buen chapuzón en el Charco de la Cuna, excepcional poza de aguas turquesas.
Durante la excursión pasaremos por puentes colgantes de la Cerrada de Elías, cascadas, el nacimiento del río Borosa o la laguna de Valdeazores. Sin duda, un paraíso acuático para los perri-nutrias.
