La higiene dental de los perros no solo afecta a su boca, si no la cuidamos puede llegar a afectar a todo su organismo. Si un perro sufre dolor en la bocaporque sus encías están infectadas o no puede masticar correctamente porque tiene los dientes en mal estado, tratará de evitar ciertos alimentos. Esto repercutirá negativamente en su nutrición y en su salud general pero, lo que es más peligroso, correrá el riesgo de sufrir laenfermedad periodontal y la periodontitis. Esta dolencia puede llegar a provocar infecciones graves que afecten a órganos vitales como el hígado, el riñón o el corazón.
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Cuidar la higiene dental de los canes no es una cuestión estética, es verdaderamente importante y puede repercutir, incluso, en su longevidad. Es lo que opina Alexandra Horowitz, profesora investigadora y etóloga además de autora de varios libros altamente recomendables (En la mente de un perro y Being a Dog). Horowitz es tajante en sus conclusiones: los canes que viven más tiempo son aquellos cuyas bocas y dientes han recibido los cuidados adecuados, al menos parte de su vida.
Una razón de peso para tener claro cómo detectar posibles problemas bucales y también saber cuándo es necesario acudir al veterinario para una limpieza dental. Por eso mismo hemos consultado la cuestión a Nutro Expertos y esto es lo que han compartido con nosotros.
Hay que tener presente que a partir de los 2-3 años TODOS los perros pueden sufrir la enfermedad periodontal si no mantienen una higiene bucal correcta aunque los canes más pequeños son más propensos.
El sarro es el culpable de la mayoría de problemas bucales de los perros pero no aparece de un día para otro: primero tiene que darse una acumulación de placa bacteriana en la boca de nuestro can.
- La placa bacteriana
La placa dental se va formando en la superficie de los dientes y las encías a las pocas horas de comer: es una acumulación de microorganismos que no se aprecia a simple vista. Tiene un color entre blanco y amarillo y se elimina al cepillar los dientes.
- El sarro
Si la placa no se limpia entonces, poco a poco se endurece y se convierte en sarro, es esa capa marrón que tienen algunos perros en la parte superior de los dientes.
Es mucho más difícil de limpiar que la placa, ya no sirve un simple cepillado. El sarro es muy duro y tiene huecos: ahí es donde se acumulan las bacterias que luego producen daños en las encías.
El sarro suele aparecer sobre los 2 o 3 años de edady los canes de tamaño más pequeño suelen tener mayor predisposición puesto que sus dientes también son más pequeños y es más fácil que entre ellos se acumulen restos de comida.
El sarro acumulado que desemboca en una infección de las encias es lo que se conoce como enfermedad periodontal, un problema que afecta sobre todo a:
Si las bacterias acumuladas debido al sarro se multiplican y se produce una gingivitis (inflamación / sangrado de las encías), el problema puede agravarse llegando a la raíz del diente. Y puede llegar a darse la pérdida de piezas dentales.
Lo ideal, claro, es evitar la formación del sarro y para ello la prevención es clave: hay que limpiar los dientes a nuestros canes cada díao, cómo mínimo, darles juguetes que favorezcan la masticación o utilizar premios o huesos dentales (como Greenies que es 100% natural).
Así también logras alargar el tiempo entre una limpieza dental y la siguiente: cepillado diario, huesos dentales y juguetes masticables(como nervios de toro o cornamentas de ciervo).
Si ves que tu can tiene alguno de estos síntomas entonces deberías visitar al veterinario cuanto antes para que pueda analizar el estado de la boca de tu can y recomendarte el tratamiento idóneo.
– Encías inflamadas
– Mal aliento
– Sangre en la boca y en la saliva
– Dificultad a la hora de comer
– Quistes o bultos en la boca
Los veterinarios de la Clínica Veterinaria Son Dureta nos aclaran cómo es proceso de limpieza con pulido de dientes:
Primero se elimina el sarro y la placa adherida a la superficie de los dientes a través de un equipo de ultrasonidos que garantiza la integridad de las piezas dentales y que elimina en profundidad cualquier resto de suciedad.
Después hay que pulir los dientes con una fresa especial que termina de eliminar la placa bacteriana.
El can se queda en observación hasta que despierta de la anestesia.
Y sí, aclaran desde esta clínica, la anestesia general es indispensable porque el veterinario necesita que el can esté totalmente quieto y este procedimiento puede causar a un perro estrés o dolor si está despierto:
“Con el paciente despierto o sólo sedado, la limpieza dental no se va a realizar correctamente ya que se debe limpiar sobre el diente pero también a nivel subgingival, lo que requiere un plano anestésico correcto. Además, los limpiadores dentales van a irrigar agua y hay riesgo de aspiración a vías respiratorias si no se realiza una anestesia correcta con intubación traqueal”.
Por supuesto, mientras está bajo la antestesia en esta clínica controlan el ritmo cardíaco, el ritmo respiratorio, el porcentaje de CO2 y el oxígeno en sangre, se realiza un electrocardiograma continuo y se mide la temperatura y la presión arterial.
A partir de cierta edad, puede ser un tratamiento anual o bianual: es tu veterinario, lógicamente, quien mejor podrá determinar el momento idoneo para realizar una limpieza dental a tu perro.
Recuerda que si tras su limpieza dental te preocupas por seguir las pautas correctas (cepillado diario, uso de huesos dentales para perros y juguetes masticables bien seleccionados),entonces podrás alargar el tiempo hasta la siguiente limpieza.
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