La obesidad canina es un problema creciente en todo el mundo. En EEUU los datos son claramente preocupantes: se estima que un 52.6% de los perros sufren sobrepeso o son directamente obesos, es decir 43.8 millones de perros.
Incluso Volkswagen se hizo eco de la cuestión, ironizando sobre los problemas de peso del prota canino de este memorable y divertido anuncio creado para la Super Bowl de 2012.
Ironías aparte, el exceso de peso en los perros es un grave problema que se traduce en enfermedades diversas (desde osteoartritis a diversos tipos de cáncer) y en una esperanza de vida reducida (hasta dos años y medio menos)
También en España: aquí se calcula que entre un 20 y un 40 % de los canes podrían ser obesos.
Por eso es tan importante hacer incapié en la necesidad de que los canes hagan sufiente ejercicio, de que no se les dé demasiado de comer -si, por ejemplo, un día de das más chuches de lo normal, deberías reducir su ración de pienso-, para evitar que, tal y como sucede en el mundo de los humanos, la obesidad se convierta en una epidemia.
Estos son los rasgos de los canes que tienen un peso correcto:
- Al tocar el costillar puedes palpar las costillas con facilidad.
- La barriga es ligeramente cóncava cuando está de pie (Como Colega en la foto... no le cuelga grasa de la barriga)
- Si miras a tu can desde arriba, su cintura está claramente marcada.
Tu perro sufre de sobrepeso cuando:
- Las costillas están recubiertas por una capa de grasa.
- Su estómago es convexo, puedes incluso pellizcar algún michelín de su barriga cuando está de pie.
- Si le miras desde arriba no se aprecia la cintura.
- La espalda es ancha y plana.
No hay milagros, igual que para los humanos la clave está en cuidar la alimentación y en hacer más ejercicio.
En la web dedicada a prevenir la obesidad canina en EEUU tienen todo tipo de herramientas y guías detalladas para ayudarnos en el caso de que necesitemos que nuestro perro adelgace.
El tema de la sobrealimentación es recurrente: no nos damos cuenta de cuánto pueden engordar las chuches caninas (entre 30 y 300 calorías), por mucho que sean naturales, light, sanas, etc. Ssi a eso le añadimos que muchos tenemos tendencia a compartir parte de nuestra comida con nuestros canes, sin percatarnos de que ellos necesitan muchas menos calorías que nosotros... el problema está servido.
Todo suma y si estás venga premiar a tu perro con comida, a la larga es fácil que engorde.
El consejo es doble: además de ser consciente de cuántos premios le das al día, ¿por qué no pruebas a premiarle de otra manera? Puede ser con juegos, tirándole la pelota, si es de los que se divierte persiguiéndola. Incluso, con las chuches, pero jugando a escondérselas para que tarde más tiempo en encontrarlas y haga ejercicio tanto físico como mental.
Otro consejo fácil, siempre que tu perro no tenga problemas de salud, es andar media hora al día más, pero a buen ritmo, no en plan olisqueo todas las farolas del barrio.
Si tú no tienes tiempo, podrías recurrir a un paseador de confianza.
En EEUU van más allá, ahí ya se han puesto de moda... los gimnasios para canes.Y seguro que esa idea no tarda en llegar a España.
Sí, cada vez hay más centros donde además de agility o clases de socialización se esfuerzan por ofrecer todo tipo de actividades para que los canes hagan más ejercicio, con o sin sus dueños, para que así recuperen su peso ideal y, de paso, la salud.
Bueno, hay uno que tiene hasta... discoteca canina.
Este otro centro en Florida tiene de todo, tanto para canes con problemas de peso como de salud: piscina de terapia, masajes...
Aquí podéis ver cómo trabajan con varios canes que tienen que adelgazar. Da un poquito de penita, la verdad, ver al pobre Golden en la cinta de correr...
