La disfunción cognitiva en los perros o disfunción cognitiva canina (SDC, Síndrome de Disfunción Cognitiva) es una enfermedad que afecta a los perros más mayores, normalmente a partir de los 10 años. Los síntomas son similares a los de las personas que sufren demencia o que tienen Alzheimer. El SDC crea cambios patológicos en el cerebro que ralentizan el funcionamiento mental de los perros y producen pérdida de memoria, de función motora... No es una dolencia tratable pero sí hay tratamientos paliativos para reducir la degeneración del cerébro.
Fomentar la agilidad mental de nuestros canes puede ser una manera de retrasar el envejecimiento de su cerebro pero lo cierto es que no se sabe cuál es la causa de la disfunción cognitiva. Se intuye que la genética podría tener algo que ver puesto que no afecta a todos los perros pero su prevalencia es relativamente elevada, oscilando entre el 28% en perros de 11 a 12 años y el 68% en perros de 15 a 16 años.
Estos son los principales síntomas de la disfunción cognitiva en los perros:
Desorientación / confusión
Ansiedad / desasosiego
Irritabilidad extrema
Disminución del deseo de jugar.
Lamido excesivo
Olvidar comportamientos / normas habituales (dónde hacer sus necesidades, etc.)
Mostrarse más lento a la hora de aprender nuevas tareas.
Incapacidad para seguir caminos habituales.
Incontinencia fecal y urinaria.
Pérdida del apetito (anorexia)
Cambios en el ciclo de sueño (vigilia nocturna, dormir durante el día)
En estos dos vídeos el veterinario Eduard Martí de la Clínica Veterinaria Animalia de Barcelona desgrana por un lado los síntomas más habituales que nos pueden hacer sospechar que nuestro can pueda tener disfunción cognitiva...
Y por otro nos explica todos los tratamientos paliativos que se pueden aplicar para reducir la degeneración del cerébro.
Si crees que tu can puede tener SDC, habla con tu veterinario para que te pueda dar las pautas concretas que ayudarán a tu perro.
Tal y como recalca este experto de Clínica Veterinaria Animalia de Barcelona, además de posibles medicamentos o cambios en la alimentación, nosotros podemos hacer mucho para ayudar a nuestro can: juegos de olfato, paseos adecuados, por supuesto evitar reñir al can si se hace pis o caca...
Si variamos su rutina, en la medida de lo posible, y le hacemos discurrir, esto será positivo.
