Suena bobo, casi a chiste y de hecho hay vídeos virales que hacen ver que un perro con la cabeza dentro de una bolsa es algo gracioso pero no, es todo menos eso. Es tremendamente peligroso. En pocos minutos un perro puede morir asfixiado al meter su cabeza dentro de una bolsa de patatas, de una bolsa de chuches o de cualquier bolsa de plástico que contuviera algo de comer: en EEUU se calcula que cada semana mueren hasta 3 canes por esta causa.
Ha vuelto a suceder y de nuevo la familia del perro ha querido compartirlo porque ellos no tenían ni idea de que algo así podría pasar.
Petey también murió por esta misma causa y su familia, igualmente, lo contó en sus redes sociales con la intención de concienciar, de correr la voz para que una tragedia similar no se repita.
Volvieron del trabajo y se extrañaron de que Petey no viniera a salurdar como siempre: encontraron al perro en el suelo, con la cabeza dentro de una bolsa de patatas; se había asfixiado. Por lo visto había logrado coger la bolsa que ellos dejaron en la encimera y así ocurrió el horrible accidente.
Ellos están destrozados, se sienten culpables por no haber evitado el accidente que acabó con la vida de su can pero lo cierto es que mucha gente desconoce el peligro que ocultan las bolsas de plástico.
Parece imposible que un can no pueda quitársela con las patas, pero... no, no puede. Es una trampa mortal.
Hay incontables foros y páginas de facebook donde dueños de perros y profesionales comparten información y alertan sobre el riesgo para ciertos canes si hay bolsas de plástico con olores interesantes cerca.
Atraídos por el olor, los perros meten su cabeza dentro y al respirar, cada vez se ajusta más a su cabeza al ir desapareciendo el oxígeno.
Un perro puede ahogarse y morir en menos de 5 minutos. Y es un peligro para cualquier tamaño de perro, no solo para los pequeños.
Es una advertencia seria, en esta página también tratan de correr la voz para evitar más desgracias.
