Un reciente estudio llevado a cabo por el departamento de Ciencia Veterinaria de la Universidad de Bristol pone de relevancia que para predecir qué perros tendrán comportamientos agresivos, más que las razas, lo que importa es... quién es el dueño del can y cómo ha sido educado. La educación temprana es clave para prevenir la agresividad.
Un reciente estudio llevado a cabo por el departamento de Ciencia Veterinaria de la Universidad de Bristol pone de relevancia que para predecir qué perros tendrán comportamientos agresivos, más que las razas, lo que importa es... quién es el dueño del can y cómo ha sido educado. La educación temprana es clave para prevenir la agresividad.
Es algo que a cada vez más profesionales les parece evidente, hasta la Casa Blanca está oficialmente en contra de la legislación basada en razas de perros, pero aún queda mucho camino por recorrer para reducir los estereotipos relacionados con las razas consideradas potencialmente peligrosas.
Unos 4000 dueños de perro, según explican en Smithsonian.com, respondieron a las preguntas de los investigadores, a través de un cuestionario.
Algunas de las conclusiones del estudio son:
- Los dueños que utilizan castigos y refuerzos negativos a la hora de educar a sus perros tienen el doble de posibilidad de que sus canes muestren comportamientos agresivos hacia extraños y, también preocupante, el triple de posibilidades de que esos canes puedan ser agresivos con algún miembro de la familia.
- Los perros que asistieron a clases de socialización cuando eran cachorros tienen la mitad de posibilidad de tener comportamientos agresivos.
- Los perros cuyos dueños son menores de 25 años tienen el doble de posibilidad de tener comportamientos agresivos que aquellos que pertenecen a mayores de 40.
- Y, en general, no es apropiado utilizar la raza como principal característica a la hora de estimar si un animal será agresivo con las personas.