¿Realmente son útiles las clases de socialización para cachorros? Es una pregunta que seguramente se harán muchos humanos perrunos, sobre todo los primerizos, y la respuesta es que sí, las clases de cachorro tienen claros e importantes beneficios para los perros. Lo acaba de demostrar un estudio de HVU Rof Codinaliderado por la veterinaria y etóloga Ángela González Martínez, con la que hemos hablado para que nos explicara algo más sobre esta interesante iniciativa.
Ian Dunbar es el responsable de que, desde 1981, los perros más jovenzuelos vayan a clase, según explica el profesor Stanley Coren en su blog: previamente, el consenso era que no merecía la pena intentar enseñar nada a perros de menos de seis meses o incluso un año.
Ahora, este nuevo estudio de HVU Rof Codina viene a probar que, efectivamente, es muy útil que los cachorros vayan a clase puesto que tiene un efecto claro sobre su comportamiento cuando llegan a la edad adulta.
En el estudio se ha analizado el comportamiento de 80 perros (32 de los cuales asistieron a clases de cachorros y 48 que no lo hicieron).
Los canes que sí han ido a las clases de cachorros han sido, a su vez, divididos entre cachorros (menores de tres meses) y perros jóvenes (más de tres meses).
Las clases se realizaron en el HVU Rof Codina, Facultad de Veterinaria de Lugo, y fueron dirigidas por la veterinaria etóloga del centro. Los perros asistieron a una sesión de una hora a la semana durante seis semanas.
Los resultados obtenidos indican que todos los perros que acudieron a las clases - tanto los cachorros como los jóvenes- cuando son adultos presentan menos agresividad a otros perros de la familia: es decir, a través de esas sesiones de socializaciónson capaces de adquirir herramientas que resultan clave para que puedan tener una buena convivencia con otros perros.
También se ha visto, explica Ángela González Martínez, que estos canes presentan menos miedo ambiental, lo que resulta especialmente beneficioso dada la alta prevalencia de fobias a sonidos fuertes, como tormentas o petardos, que suele afectar a tantísimos perros.
Además, son más fáciles de educar y son menos reactivos cuando los tocan.
Esto último es especialmente importante de cara a facilitar las visitas al veterinario, algo que seria clave, por ejemplo, para la detección temprana de incontables dolencias puesto que si el perro está estresado cuando está siendo explorado, eso hace que sea más complicado detectar eficazmente otros problemas de salud.
¿Conclusión? Le estarás haciendo un enorme favor a tu cachorro si os apuntáis a clases de socialización. En nuestra web puedes localizar a educadores caninos en positivo en tu zona que ofrezcan este tipo de cursos.