Socializar a un cachorro es enseñarle, de manera gradual y tranquila, ese nuevo mundo en el que va a vivir. Es permitirle ir conociendo distintos entornos, sonidos, personas, animales o experiencias para que tenga confianza ante nuevas situaciones.Este proceso es realmente importante porque así es como ese cachorro podrá convertirse en un perro bien educado a la vez que flexible, capaz de adaptarse y estar cómodo tanto con sus congéneres como con las personas.
En este artículo os compartimos los aspectos más importantes en la socialización de los cachorros, pero en la web de Royal Canin encontraréis mucha más información para ayudar a quien necesite trucos prácticos para afrontar con éxito la apasionante tarea de socializar y educar a su can.
¿Cuándo hay que comenzar a socializar a un cachorro?
Un error frecuente es pensar que no podemos sacar de casa o socializar a un cachorro hasta que no haya completado su periodo de vacunación. Lo cierto es que -con cuidado- sí se puede y se debe empezar a socializar a los cachorros antes de terminar la vacunación porque es un periodo de su desarrollo clave, en el que justamente necesitan vivir esas experiencias.
Como antes de tener todas sus vacunas sí que son más susceptibles a los agentes infecciosos externos, lo que hay que evitar es que el cachorro pueda estar en contacto con perros no vacunados. Por eso no hay que llevarlos a parques caninos o a zonas donde pueda haber heces de perros desconocidos, que puedan estar enfermos, tener algún tipo de bacteria, etc.
En cambio, os proponemos algunos consejos. Sí que podrías:
- Salir a la calle con el cachorro en brazos para que empiece a ver y escuchar cosas distintas.
- Llevar al cachorro a dar paseos cortos en coche.
- Invitar a gente a casa para que tu cachorro interactúe con distintas personas.
- Que se acostumbren a elementos que en casa normalmente no han visto, como por ejemplo gafas de sol.
-Traer amigos a casa con perros sociables, sanos y perfectamente vacunados que no frecuenten lugares con gran concentración de perros.
-Clases de socialización en la que participan cachorros entre 8-12 semanas con al menos una vacuna y supervisados por un experto en conducta.
¿Cómo hay que comenzar la socialización de un cachorro?
La socialización debe ser un proceso gradual, no satures o sobrecargues a tu cachorro.
El objetivo es que pueda descubrir y habituarse, poco a poco, a diferentes sonidos, ambientes, personas, animales… Una vez que ya sí tenga todas sus vacunas os podréis aventurar a más lugares e interactuar con otros perros de manera segura.
Puedes crear una lista de tareas -o apoyarte en la guía de la web de Royal Canin- para saber qué estímulos presentar a tu cachorro, siempre de forma positiva y tranquila, por ejemplo:
- Sonidos de casa (lavadora, aspiradora, música, secador de pelo, el timbre de la puerta, el telefonillo…)
- Sonidos de la calle (alarmas, coches, trenes, portazos, fuegos artificiales…)
- Entornos distintos al hogar (centros comerciales, ascensores, trenes, la calle, el veterinario…)
- Hombres, mujeres y niños de distintas edades vestuarios diferentes (gente de uniforme, con gafas, sombreros, ciclistas, corredores…), acostumbrándoles a sonidos humanos: risas, llantos, aplausos…
Respeta el ritmo de tu cachorro: no le obligues a hacer algo con lo que se muestra incómodo. Si ves que se asusta, intenta pensar en otras formas de mostrarle el mismo estímulo o prueba más adelante.
¿Cómo conseguir que sea agradable para mi cachorro?
Además de gradual, el proceso debe ser gratificante para tu cachorro: cada nueva experiencia debe ser respaldada por algún tipo de recompensa (juego, porción de su propio alimento o afecto) para así reforzar el comportamiento deseado.
Es decir, el refuerzo positivo siempre será la forma de enseñarle el mundo a tu cachorro y, después, de enseñarle cómo quieres que se comporte.
Si optamos por reforzar con su alimento, es importante que cuidemos la cantidad para no pasarnos de la dosis diaria recomendada. Un truco para ello es poner la dosis diaria en un recipiente y así sabremos cuál es la cantidad que podemos utilizar en las tres tomas y aprovechar esas tomas para enseñarles diferentes ejercicios.
Es importante permitir que tu cachorro observe con calma los nuevos entornos o las experiencias, antes de que se involucre demasiado.
No le fuerces enfrentarse a nuevas situaciones, personas o lugares sin darle un poco de tiempo para que se aclimate. Por ejemplo, si llegas a un lugar concurrido o donde hay mucho barullo y ruido, permite a tu cachorro pararse y observar, dale algún premio…
¿Qué pasa si veo que mi cachorro tiene miedo a algo?
El miedo puede manifestarse de diversas maneras: gemidos, rigidez, poner la cola entre las piernas y también morder o ladrar.
Si crees que tu cachorro se ha asustado por una persona, una situación, un ruido o cualquier otra cosa, aléjate tranquilamente de esa situación hasta que tu perro se calme también.
Igualmente, si ves que tu can reacciona de manera extraña o con incertidumbre ante una nueva situación, muestra tranquilidad y, en todo caso, distrae a tu cachorro, que se fije en ti, dale un premio de su propio alimento o una caricia…
¿Podemos ir a clase?
Sí, ¡sin duda! Las clases de cachorros son realmente útiles y beneficiosas.
Para encontrar una clase de cachorros, puedes buscar en SrPerro educadores caninos en positivo en tu localidad y mirar en sus webs; la mayoría suelen tener clases grupales.
Es el lugar perfecto para enseñar a tu can nuevas habilidades y también es el espacio idóneo para que socialice con otros canes y humanos de manera segura, en presencia de profesionales que te podrán orientar y aconsejar en todo momento.
Así podrás aprender sobre cómo se comunican los perros e interactúan entre ellos. Es más, un interesante estudio de HVU Rof Codina, de la Facultad de Veterinaria de Lugo, ha demostrado que las clases de cachorros tienen un efecto claro y positivo sobre el comportamiento de los perros cuando llegan a la edad adulta. Es decir, los beneficios a largo plazo son considerables.
PD 1 Más pistas para saber cómo entrenar a un cachorro (y disfrutar en el intento) en la web de Royal Canin
PD 2 La foto que encabeza el texto es de AnjaGh en Pixabays