Penny ha tenido mucha suerte: esta Pastor Alemán tiene una vecina que podría llevarse el premio a la vecina más perruna del mundo...
Jennifer Bowman veía a Penny brincar todos los días: la perra quería saber qué pasaba del otro lado de la valla porque en casa de Jennifer hay otro can y un minino, Olive y Max.
Salta que te salta como una loquita, ladrando... a ver si lograba saber qué hacían Olive y Max y Jennifer.
Hay gente que se hubiera enfadado y que seguramente le habría llamado la atención al dueño de Penny para que controlara a su perra pero Jennifer no, más bien lo contrario.
Ella ha tenido la genial idea para facilitarle el espionaje a Penny, para que la perra pudiera ver todo lo que sucedía del otro lado de su jardín sin cansarse tanto saltando: le ha hecho una ventanita a medida a la perra. ¡Y Penny está encantada!No os lo perdáis:
La divertida idea de Jennifer ¡ha salido hasta en las noticias de Fox!