Squirrel (Ardilla) fue atropellada por un coche en Ciudad del Cabo. Su familia la llevó a urgencias: en el veterinario pudieron salvar su vida pero la perra tenía una pata tan machacada que la única opción fue amputársela.
Y ahí es cuando empezó el nuevo drama para esta pequeña: sus inhumanos humanos decidieron que la perra les daba grima, que con tres patas iba a asustar a los niños y que ya no la querían.
Según explican en Sidewalk Specials incluso pidieron que fuera sacrificada...
Es difícil de entender, o más bien imposible de entender. Obviamente los responsables de esta asociación que trabaja en Sudáfrica no les hicieron ni caso. Lo que sí hicieron fue ocuparse de Squirrel y compartir su historia en redes sociales: llovieron las peticiones para adoptar a la perra.
Ahora se llama Squash y está decidida a ser feliz, sobre sus tres patas y con una familia que la quiere tal y como es.
Hay quien llama "trípodes" a los perros que tienen tres patas y obviamente no deberían darle grima o pena a nadie. Hemos hablado de muchos canes así: normalmente se adaptan a la velocidad del rayo a su nueva situación.
Hay algunos consejos útiles para quien tenga o adopte a un trípode: hay que poner cuidado de que no engorde, en su caso es aún más importante que esté en el peso adecuado. Al principio, sin duda, hay que tener paciencia porque aunque la mayoría se adaptan rápido a la nueva situación, no tiene porqué ser así. Es útil invertir en una cama ortopédica apropiada. Y dado que con tres patas le costará algo más andar, sobre todo al principio, es bueno poner ojo en que no se resbale: si en casa tienes tarima o parquet puedes ayudar al can poniendo alfombras, por ejemplo. Y cuida sus almohadillas, revísalas para asegurarte de que no tenga heridas, puedes colocarle pomadas especiales...
