Toast es absolutamente zampable: este Goldendoodle tiene una particularidad, cuando está demasiado feliz, demasiado nervioso, se queda instantáneamente dormido porque tiene narcolepsia y cataplexia.
Cuando está jugando, cuando está comiendo algo rico, cuando conoce a gente nueva.... todo esto puede hacer que Toast caiga dormido. Y como tiene una vida muy feliz y repleta de actividades interesantes esto le sucede al menos 100 veces al día.
Su familia explica que Toast fue entregado en el veterinario por su criador cuando tenía solo mes y medio para que lo sacrificaran porque no lo podían vender -aunque tampoco sabían qué era lo que le pasaba, no se querían molestar en averiguarlo...
Por suerte el veterinario se negó y contactaron con una protectora para que se hiciera cargo del perrete.
Así comenzó su nueva aventura: lograron diagnosticar su problema (además de narcolpesia tiene una cataplexia severa) y una familia, tras valorar si podían, realmente, ayudarle, decidió acogerlo temporalmente en su casa y cuidar de él.
Por fortuna, esta misma familia se enamoró de Toast. Y, como explican en este vídeo, tras hacer un buen número de ajustes en su estilo de vida y en su hogar para que el perrete pudiera estar realmente bien, decidieron que tenían que ser su hogar por siempre jamás.
Toast convive con otra perra que es su amiga del alma y su máximo apoyo, Laney. Podéis verles en acción en el vídeo que The Dodo ha dedicado al"perro más feliz del mundo",como lo describe su humana, Laura.
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