Rubén es enfermero de la UCI del Hospital Moisés Broggi de Sant Joan Despí y él tiene perro, un Westy blanco llamado Barney, pequeño, cariñoso y fiel. "Es parte de mi familia y ninguno de nosotros se imagina la vida sin él." Y Barney ha sido, en gran medida, la inspiración para hacer posible esta maravillosa historia, la que Rubén ha compartidoen el blog de Proyecto HU-CI, Humanizando los Cuidados Intensivos. Y la misma que compartimos aquí, con su permiso. Rubén ha logrado poner una sonrisa en la cara de un paciente que llevaba cerca de 4 meses ingresado, 4 meses sin ver a su perra, a Blanca.
"Enric es un señor que lleva cerca de 4 meses ingresado en nuestra unidad. Su familia al ver que el ingreso se iba prolongando nos pidió si podían traer fotografías de los hijos, nietos y demás familiares.
Un día al entrar a su habitación la pude ver: pequeña, viejita, con unos ojos enormes y blanquita. De ahí su nombre, Blanca, la perra de Enric y Ana.
Recuerdo que ese mismo día, después de hablar con Enric y su familia sobre el fuerte vínculo que tenían con su perrita, le prometí que haría lo posible porque pudiera ver a Blanca. En aquel momento la situación clínica de Enric no permitía poder hacer grandes aventuras, pero poco a poco fue mejorando.
Hace un mes, el 13 de agosto, con una situación clínica estable, con una traqueostomía y con Enric acomodado en su butaca, pedí permiso a los médicos para poder llevarlo a la calle después de 4 meses para uno de esos #paseosquecuran, y si fuera posible, aprovechar y ver a su perrita. A todos les pareció genial.
Llamé a Ana, la mujer de Enric a las 10h de la mañana y le expliqué el plan. A ella le sorprendió mucho que un paciente de la UCI pudiera salir a la calle. Le pregunté si era posible traer a Blanca para que Enric la pudiera ver, todavía sorprendida me dijo que haría lo posible por traerla.
Enric no sabía nada y yo esperaba darle una sorpresa. Cogimos las cuatro cosas básicas para el traslado y salimos a la calle.
Le gustó mucho volver a ver el sol, que le diera un poco el aire, estaba contento.
Pero todavía faltaba lo mejor. Cuando vimos aparecer al hijo de Enric con la perrita, a él le cambió la cara, no se le quitaba la sonrisa, ¡volvía a ver a Blanca después de 4 meses! Estaba igual, como él la recordaba.
Estuvimos 15 minutos en la calle y Blanca que todavía estaba un poco nerviosa del viaje no se separaba de la butaca de Enric, que la buscaba constantemente con la mano. Fue un momento muy especial y que estoy seguro que a Enric no se le olvidará nunca.
Desde ese día Enric ha salido a la calle casi a diario, y ayer lunes, volvieron a traer a Blanca.
Todos mis compañeros y compañeras, médicos, enfermeros y auxiliares coinciden en que Enric está mucho más animado, con una actitud más positiva, hace mejor cara, y en cuestión de dos semanas parece que haya espabilado un montón. Se le ve con más fuerza, casi se aguanta de pie con poquita ayuda e incluso parece que empieza a dar algunos pasos.
Su estado de ánimo ha cambiado y todos esperamos que siga mejorando poco a poco, con la ayuda de su familia y el amor incondicional de su perrita, Blanca."
Aquí podéis ver el reportaje que han emitido en TV3 sobre Enric, Blanca y también Rubén, el que ha hecho posible esta historia maravillosa a todos los niveles. Y el que ha impulsado la iniciativa HUCI-CO: Perros en la UCI.
Una nueva muestra de la importancia del vínculo entre hombres y perros y su poder terapéutico.
Si no os aparece el vídeo, pinchad aquí para verlo.
Más información en el blog de Proyecto HU-CI, Humanizando los Cuidados Intensivos. Y en concreto, HUCI-CO, Perros en la UCI.
No es la única historia en este blog que pone de relieve la importancia que tienen los perros en la vida de los humanos. Algún día esto será la norma. Algún día.