Se llama D-O-G, pero pronunciando cada una de las letras: es el primer gato que "trabaja" en las oficinas de Duo Dogs, una asociación sin ánimo de lucro que entrena a perros de asistencia para personas que necesitan este apoyo y que no tienen recursos y también perros de intervención asistida.
El minino se ha hecho de lo más perro porque pasa todo su tiempo con sus amigos canes. De hecho, la labor de DOG es importante para estos perros de asistencia y por eso mismo fue galardonado con el premio de la ASPCA como "Gato del año" en 2018.
Fue adoptado de chiquito y desde entonces vive entre perros. Algo que empezó por casualidad está resultando de lo más útil puesto que la presencia de DOG también contribuye a educar y socializar a estos canes: así aprenden a llevarse bien con gatos, algo que puede resultar clave en su vida futura cuando se conviertan en los perros de alguna familia en la que ya haya algún minino.
Pero D-O-G, claramente, no lo ve como un trabajo: él está tan pancho y feliz entre todos estos guapérrimos labradores. Él se siente tan perro como ellos, o eso parece.
Sí, el jovenzuelo D-O-G va camino de convertirse en una, ejem, gran ayuda: se zampa la comida de los canes, trata de jugar con ellos cuando deben estar concentrados, les roba la cama... Es imparable y mejora el humor de todos los que trabajan en esta estupenda organización.
PD: No os perdáis esta publicación en la que anuncian un programa de intervención asistida con gatos... Gatos que solo se dejarán tocar cuando a ellos les apetezca :-)
Sí, fue una inocentada, lo compartieron el 1 de abril, que es cuando se celebra el día de las bromas en el mundo anglosajón, el April Fools Day: