"San Juan es un infierno. Esto ya lo sabía. Lo he vivido toda la vida con mis animales pero cuando entré en política me di cuenta que se podía hacer algo. Que se tenía que hacer algo," nos explica Noel Duque Alarcón, responsable de Bienestar Animal -entre otras funciones- en el Ayuntamiento de Terrassa.
Desde su puesto en el consistorio lleva años tratando de cambiar esa realidad: sin prohibir la pirotecnia pero incentivando la empatía y, sí, logrando avances año a año a través del diálogo
Y no solo de cara a Sant Joan, también han conseguido récord de adopciones y acogidas en el CAAD, (Centro de Atención de Animales Domésticos), han puesto en marcha un protocolo concreto ante el maltrato animal, están dando charlas en institutos y en residencias sobre bienestar animal y en breve empiezan las obras del nuevo crematorio municipal para animales de compañía.
De todo ello y mucho más no ha hablado Noel Duque Alarcón.
"Si queremos civismo y queremos empatía, tenemos que generarlo, tenemos que marcar el camino", tiene claro Duque Alarcón, así como que "cualquier tradición que haga sufrir a alguien se tiene que revisar y adaptar para que no sufra nadie".
Por eso mismo este año, una vez más, estarán tres días antes de Sant Joan y el propio día de Sant Joan entregando snacks calmantes naturales a las familias con perro en la puerta del Ayuntamiento. Es un producto totalmente natural, que no necesita receta y no tiene efectos secundarios. Pero habrá una veterinaria durante los tres días para ofrecer consejos concretos.
Esta idea fue un punto de inflexión, nos explica, por varias razones: este producto, un tranquilizante natural con un efecto de unas cuatro o cinco horas, se regala a las personas con perro. Su importancia no es solo el snack en sí, sino la imagen de cientos de familias haciendo cola en la puerta del ayuntamiento con sus canes le estaba diciendo al resto de la ciudadanía que es vital que controlemos los estruendos. Estás viendo cómo se moviliza parte de la población porque la haces sufrir con esta tradición.
"No es la pastilla o el snack en sí, es el mensaje que das por la empatía. Detrás de todo esto está la empatía. Tenemos que saber que el nivel de conciencia de una parte de la población y el de empatía son bajos, por eso pasan las cosas que pasan. (...)
Precisamente para esa gente son estas campañas. Hay que intentar que haya un debate, un conflicto, que vean muchos vídeos de animales en shock, de personas con autismo en shock.
Que vean que sus acciones pueden hacerle la vida mejor al que tienen al lado o se la pueden hacer mucho peor".
Todo comenzó con la campaña de San Juan Inclusivo (#SantJoanInclusiu) que fue impulsada desde dos concejalías distintas en el Ayuntamiento de Terrassa.
"A raíz de esta campaña nos contactaron empresas que hacen pirotecnia de baja intensidad, algo que nos pareció muy interesante.
A día de hoy estamos trabajando para que paguen menos tasas: es algo que tiene que ir a pleno y se tiene que trabajar bien. Pero dado que todas las paradas de pirotecnia pagan una tasa concreta, para incentivar a los que son más respetuosos con el medio ambiente y las personas habíamos pensado en facilitárselo lo máximo posible.
Eso sí, siempre será el mercado de la pirotecnia quien "mande" porque si la gente luego no compra los petardos de baja intensidad, pues vamos mal.
Como buena noticia, el año pasado escuché hablar al presidente del gremio de pirotecnia y comentaba que cada vez se compra menos y cada vez se compra más pirotecnia de baja intensidad.
En paralelo hay un bando del alcalde para Sant Joan en el que pide mucha responsabilidad y, sobre todo, que solo tiren petardos el día de la verbena.
Cuando la ciudad se convierte en un campo de cohetes a cualquier hora y en cualquier rincón es cuando hay un problema: por eso lo primero que hay que lograr es que la gente entienda que no pueden estar dos semanas tirando petardos, antes y después de la verbena de San Juan.
"Incluso pensando en votos, sale a cuenta. Si piensas en personas y animales, en que no sufran... es obligatorio. Pero si piensas en votos, la cantidad de gente que ama a los animales, la cantidad de críos que ama a los animales y conectan con ellos de manera brutal... si tu lanzas un mensaje de compasión y empatía, estás demostrando que eres clase política y también eres persona."
"El voluntariado es lo más preciado que puede tener una ciudad". Y es gracias a los voluntarios que, como nos explica Noel Duque, no solo ha mejorado el bienestar de los animales que están en el CAAD (Centro de Atención de Animales Domésticos) sino que han logrado un récord de adopciones y de acogidas en la ciudad.
Están planeando una nueva iniciativa que no puede aún revelar pero que ya nos ha adelantado y que, en cuanto sea pública, compartiremos inmediatamente porque será algo muy, muy positivo para los perretes del CAAD. Será "un bombazo bonito, no como los de Sant Joan".
Podéis escuchar la charla entera con Noel Duque Alarcón aquí, ¡merece mucho la pena!
Te puede interesar
