Desde Espai Gos BCN, como seguramente sabréis, llevan años luchando por los derechos de las personas y familias con perro en Barcelona. Porque ellos también son ciudadanos con derechos, o debieran serlo.
La realidad es que parece ser cada día más complicado, más triste, ser perro en Barcelona: su presencia se ha prohibido en más de 80 parques y áreas verdes de la ciudad.
Hace unos días desde Espai Gos compartían este mensaje en Twitter, otro espacio chulo al aire libre donde, sorpresa, están prohibidos los perros.
La clariana de les Glòries, un altra lloc que no podem accedir amb els nostres gossos. Prenem nota d'altres ciutats com New York, on es pot accedir amb gossos a les grans parts de gespa verda #Barcelonaundogfriendly https://t.co/bbMfQJ96PW
— espai gos bcn (@espaigosbcn) July 5, 2022
Sí, en esta "gran explanada de una hectárea de césped, un espacio polivalente abierto a la ciudadanía como zona de estancia y que invita a disfrutar de la natura y a relajarse", tal y como lo definen desde el Ayuntamiento, todos bienvenidos menos las personas con perro.
Este sería el "top 12" de espacios verdes vetados a los perros en Barcelona. No son, recalcan desde Espai Gos BCN, los parques más bonitos de la ciudad pero sí los que eran más frecuentados por personas que paseaban con sus canes.
Ahora ya no pueden entrar en ninguno de ellos:
Jardins d’Emma de Barcelona
Jardins de Paula Montal
Parc / Jardí de Joan Maragall
Jardins de labiral
Jardins del Palau de Pedralbes
Parc de Cervantes
Jardins de Turó Park
Jardins d'Enric Sagnier
Jardins de Can Castelló
Parc del Laberint d’Horta
Jardins dr. Pla i Armengol
Parc de Diagonal Mar
Vamos a centrarnos en uno solo porque recientemente ha protagonizado un singular cruce de mensajes en twitter, iniciado por Albert Battle, Concejal responsable del Área de Prevención y Seguridad en el ayuntamiento de Barcelona.
Él recordaba que está totalmente prohibido el acceso con perros en el Turó...
Des de fa temps està totalment prohibida l’entrada de gossos al #TuróParc La @GUBBarcelona sancionarà els propietaris incívics. #civisme #Barcelona pic.twitter.com/A30Eg2ifTn
— Albert Batlle (@Albert_Batlle_B) June 30, 2022
Las respuestas que ha recibido son para enmarcarlas: multitud de personas -con y sin perro- parecen estar de acuerdo en algo, que es incongruente prohibir a los perros acceder a los parques y criminalizar a sus familias por encima de muchos otros actos de veras incívicos.
Incívics i molt qui decideix que un gos no pot entrar en un parc. Ells són molt més humans que qui prenc aquesta decisió. La GU deuria d'estar al servei dels ciutadans per evitar la quantitat de incidents de violència i robatoris.
— Anna Porta Marc 💛 (@annanoop_Kaur) July 2, 2022
Però la gent incivica al Turo Park a sobre la gespa o fotent el cafre a on sigui ja tal... sou uns gosfòbics.
— Aurora Bettan (@Aurora_bettan) July 2, 2022
Doncs mira, el Raval, El Born i tota Barcelona plena, és un femeŕ. No tinc ni he tingut mai gos. Però els prefereixo al desori i descontrol que hi ha a la ciutat. Patinet, bicicletes, taxi-bici. No controleu res.
— maria brugues (@mbrugues) July 2, 2022
No te vergonya! El meu gos porta xip,tinc assegurança, recullu les seves deposicions, etc. Pero visc a una ciutat que em tenca parc rera parc i el meu gos no pot fer de gos! A d'olorar i tenir espais no tenca parcs plens de bruticia que els humans deixen! PROU
— Montse Bayo (@montsebayo) July 2, 2022
Parece evidente que es cada vez más complicada la vida con perro en Barcelona, para aquellos que se preocupan por el bienestar de sus canes.
Sí, por supuesto que hay multitud de espacios dog friendly estupendos por toda la ciudad, bares, restaurantes, tiendas, galerías de arte y mucho más -obviamente, por algo tenemos hasta un libro dedicado a ellos- pero si hablamos de perros en el espacio público, es cuando se tuerce el asunto.
Las necesidades de los perros -socializar, olfatear tranquilamente, pasear- no se cubren yendo a un pequeño pipican, eso es indudable. Y las famosas "áreas de uso compartido" que debían existir en todos los barrios aún brillan, general, por su ausencia. Aunque sí hay novedades, como nos explican desde Espai Gos y como supimos a través de La Vanguardia: el Carnet Cívico no será necesario para acceder a ellas.
Por todo ello he querido volver a charlar con las responsables de Espai Gos BCN sobre la "actualidad perruna" en Barcelona. Como veréis, lo que me han contado es preocupante y triste:
¿Cuándo comenzaron estas políticas que excluyen a los perros de las zonas verdes en Barcelona?
"En la época del tripartito, cuando Iniciativa tomó las riendas del departamento d'Ecologia Urbana, Imma Mayol como Presidenta de l'Institut Municipal de Parcs i Jardins de Barcelona, pero ha sido con el gobierno de Comuns cuando más persecución y restricciones ha habido. Primero con Janet Sanz como teniente alcalde d'Ecologia y ahora con Eloi Badia también responsable de Ecologia y Presidente de l'Institut Municipal de Parcs i Jardins de Barcelona.
¿Cómo está el tema ahora con el Ayuntamiento?, ¿Han dado respuesta a alguna de vuestras peticiones?
Sigue más o menos igual. Sí que queremos reconocer el trabajo que se está haciendo desde la Oficina de Protecció dels Animals para evitar que se nos destierre de todas las zonas verdes.
Aunque tiene la misma piedra en el zapato que nosotras, Parcs i Jardins, están consiguiendo que algunas de las zonas de uso compartido sí sean en zonas verdes.
El tema de Parcs i Jardins es tremendo en Barcelona, a pesar de ponerle el título de "Institut", no deja de ser una empresa pública sufragada con los impuestos de los Barceloneses, pero viendo como actúan, su pretensión es que los vecinos estén a su servicio y no ellos al servicio de los vecinos.
Actúan como si las zonas verdes de Barcelona fuesen su jardín privado donde hacen y deshacen.
Históricamente han utilizado el incivismo como arma arrojadiza contra las personas con perro, exagerando y falseando la realidad.
Ahora que Barcelona es un desmadre de botellones y fiestas en los parques, han cambiado de estrategia y utilizan la biodiversidad para seguir prohibiéndonos la entrada a sus "jardines privados" llamándonos (a las personas con perro) bombas biológicas.
Curiosamente, nunca alzan la voz contra petardos, globos esparcidos por las batallas de agua, gente subida a los árboles para contemplar el horizonte, cazadores de abejas, árboles llenos de cuerdas y pañuelos para hacer gimnasia y acrobacias, patos muertos a pedradas, gente que arranca las flores parea llevárselas a su casa, restos de comida y basura por todas partes... y un sin fin de actuaciones que perjudican la biodiversidad que tanto dicen defender.
Curioso también que varios cargos con carnet de Iniciativa per Catalunya, hayan acabado sus carreras profesionales en este "instituto".
Es una verdadera mafia que considera a las persona con perro el actor más débil al que puede pisotear y ahora que ven como nos revelamos, les ha entrado la pataleta de niño pequeño y van haciendo referencias a estudios de impacto para demostrar que somos un peligro para la biodiversidad, estudios que hemos solicitado y nunca nos han sido entregados porque no los tienen.
Están poniendo en solfa el bienestar animal, pero nadie del ayuntamiento parcece estar por la labor de pararles los pies.
Las zonas de uso compartido, ¿cómo van?
De momento seguimos trabajando. Ahora mismo están con el cambio de normativa para desvincular el uso de estas zonas al carnet de tenencia cívica.
Afortunadamente, ¡esto hemos logrado pararlo! Este carnet suponía una discriminación de manual contra nuestro colectivo, ya que solo nosotros teníamos que pasar un examen sobre la normativa para hacer uso de estas zonas.
Si no tenías perro no hacía falta ningún carnet ni examen, lo cual era vincular el incivismo directamente a cualquier persona que conviva con un perro. Una verdadera aberración y más si tenemos en cuenta como está Barcelona últimamente.
Respecto a este cambio en la normativa, que ahora está en proceso de aprobación, están aprovechando para colarnos un gol. Van a cambiar un artículo que nada tiene que ver con el carnet y que dice que tiene que haber una zona (ya sea área de perros o zona de uso compartido) por barrio.
Hasta ahora, la normativa obligaba a que hubiese una área de perros por barrio (cosa que el ayuntamiento no cumplía) y no hacía referencia a ninguna cantidad concreta de zonas de uso compartido, solo se referenciaba a "suficientes zonas". Hemos hecho quejas y estamos esperando a que se apruebe en el pleno para poder presentar alegaciones, aunque no tenemos confianza ninguna en que nos hagan caso.
Cabe decir que nos enteramos de esto porque recibimos un mail que no deberíamos haber recibido, de no ser así, nos lo hubiésemos encontrado con el cambio dado y bendecido.
Calculan que antes de las elecciones tendrán hecho el decreto con las zonas de uso compartido, pero no las implementaran hasta pasadas las elecciones. Tontos no son, saben que si antes de las elecciones despliegan las zonas, pierden la alcaldía tanto PSC como Comuns.
Quieren llegar a las 90 zonas de uso compartido y, a pesar de que prometen que no es una foto fija y que si hacen falta más ya se harán, lo cual nos crea desconfianza absoluta, los números nos dicen que vamos muy cortos. 180.000 perros (dato del propio ayuntamiento) en Barcelona distribuidos en 90 zonas, son 2000 perros en cada zona. ¿Te imaginas?
A parte, muchas de estas zonas estan mal situadas, son pequeñas, sin sombra, sin estimulos positivos para el perro, con horarios muy reducidos o peor aún, no tienen en consideración la prespectiva de género.
Mucha política feminista pero pretenden que una mujer salga a pasear con su perro por una zona sin iluminación y solitaria con altos indices de agresiones, a las 7 de la mañana o las 9 de la noche.
Se ve que las mujeres que tenemos perro no somos lo suficientemente mujeres para que se nos proteja de la violéncia de género.
¿Hay algo que se pueda considerar positivo para las personas con perro en Barcelona en los últimos meses?
Pues lo único positivo es que cada vez más gente toma conciencia del despropósito de políticas respecto a las familias con perro.
Al final, la única defensa que tenemos es que vean peligrar la silla: tristemente las políticas se mueven por los votos y hasta ahora les han dado más rédito los anti-perros que las personas con perro.
Esto hay que cambiarlo, deben tener miedo a perder nuestros votos, y sí, digo miedo porque es lo único que entienden, miedo a perder su parcela de poder y su sueldo, solo así serán capaces de hacer políticas que se ocupen de nuestras necesidades y no nos echen de nuestra ciudad."
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