Este bello cortometraje, basado en una historia real, está dedicado a un perro que ya no está, a un perro llamado Buddy. Y logra ser a la vez tremendamente triste y también inspirador.
Shahar Arapov es el joven director de la obra y la música es obra de Yuval Kadosh: Send me an Angel, (Envíame a un Ángel) es su proyecto de final de carrera y ha cosechado un buen número de premios desde su estreno hace un par de años.
Transcurre en Israel y narra la historia de Tom, una chica de familia religiosa que, cuando llega a la adolescencia, siente que quiere morirse. Sus padres le habían regalado un perro, Buddy, y Buddy -pese a ser más bien raruno y estar todo el día rascándose- se convierte rápidamente en su mayor apoyo.
Porque resulta que Buddy tiene una enfermedad congenita de la piel y de alguna manera, Tom siente que eso les une, que a ambos les ha traicionado su cuerpo: ese cuerpo que es una tortura para ambos.
Así es como acaba descubriendo su verdadera identidad, ella es él, es Tom, un chico transgénero. Buddy no podrá acompañarlo siempre pero le mostrará el camino a seguir.
Arapov ha compartido también algunos fragmentos del cómo creó su cortometraje (y en su instagram podréis ver las maravillas de retratos perrunos que hace).
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