Lima es una cachorrita de labrador de 7 meses que se está preparando para ser una estupenda perra de terapia del equipo de Dogtor Animaly para ello tiene muchos profesionales pendientes de ella, desde Técnicos en Intervenciones Asistidas con Animales, hasta Adiestradores, Etólogos y Veterinarios.
Lima es una cachorrita de labrador de 7 meses que se está preparando para ser una estupenda perra de terapia del equipo de Dogtor Animaly para ello tiene muchos profesionales pendientes de ella, desde Técnicos en Intervenciones Asistidas con Animales, hasta Adiestradores, Etólogos y Veterinarios.
A mucha gente le choca que los perros de terapia puedan tener un contacto tan estrecho con ancianos, niños muy pequeños o enfermos sin que haya riesgo de contagio. Al fin y al cabo los perros van oliendo por la calle y se ensucian las patitas, y los perros de terapia no son distintos al resto.
Lima sale a pasear por la ciudad y por el campo, juega con otros peludos, va olfateando a ver si encuentra algo delicioso y… saluda a sus congéneres con educación, ya sabéis, les huele la retaguardia y les chupa la cara a los que le caen muy bien.
Entonces, ¿es peligroso que Lima esté en contacto con estas personas? Pues no, no lo es, porque Lima tiene un seguimiento sanitario personalizado, además de recibir un baño una vez por semana y limpiarse patitas, morro y rabo antes de cada sesión de trabajo.
Pero, ¿en qué se diferencia este seguimiento del que tienen otros perros? Vayamos por partes.
Para evitar que pueda contagiar algún parásito a las personas que tanto disfrutan de ella se toma una pastilla antiparasitaria cada mes, aunque la mayoría de sus colegas de cuatro patas se la toman cada tres meses.
Además lleva todo el año collar y pipetas para evitar que le piquen pulgas, garrapatas, mosquitos o piojos, los cuales podrían transmitirle alguna enfermedad importante; si esto ocurriera Lima tendría que dejar de trabajar, porque ningún perro que esté enfermo debe trabajar. Estos parásitos además, podrían picar a las personas.
Sigue una estricta pauta de vacunación, que en este caso sí es igual que la del resto de perros. Cada año se pone la vacuna de la rabia, leishmaniosis y heptavalente, vamos, que está bien protegida.
Por si esto fuera poco Lima va a visitar a sus veterinarios cada seis meses para que le hagan una revisión completa. En estas revisiones le realizan análisis de heces para asegurarse de que no tiene parásitos internos, analítica sanguínea para ver que todos sus órganos están bien, pruebas de enfermedades infecciosas para poder detectarlas incluso antes de tener síntomas y una exploración física completísima.
Nos aseguramos así de que tanto nuestros coterapeutas como nuestros usuarios puedan disfrutar de una interacción sin riesgo y saludable.
Para todo el equipo de Dogtor Animalla salud y el bienestar tanto de los perros como de las personas es lo más importante y luchamos día a día por conseguirlo.
Amelia García Carmona.
Etóloga veterinaria y técnico en Intervenciones Asistidas con Animales.
Dogtor Animal