Este vídeo de infarto tiene final feliz pero te deja con el corazón en la boca un buen rato: por eso mismo es una gran advertencia contra posibles imprudencias al viajar en coche con nuestros canes. Llevar a un perro suelto dentro de un vehículo -por muy pequeño que sea el can- está prohibido según la ley de Tráfico por una razón que debería resultar obvia: puede causar un accidente. Y si a esto le añadimos una ventana abierta entonces... irresponsabilidad elevada al cubo. Las personas que han grabado el vídeo lo han compartido por la misma razón: para que el tratar de hacer feliz a un can no sea a costa de arriesgar su vida.
A la gran mayoría de los canes viajeros les encanta sentir el viento en la trufa, sus caras de haber alcanzado el Nirvana son contagiosas... Sí, es un gustazo verles disfrutar cuando nos acompañan en algún viaje... siempre que ese perro esté bien sujeto, por su seguridad y por la seguridad de los demás conductores.
La idea de permitir a un perro sacar la cabeza por la ventanilla del coche en una autopista o cuando se conduce rápido es en general, poco recomendable pero si, además, el can va sin ninguna sujeción entonces la imprudencia puede tener consecuencias mucho más dramáticas que las que capta este vídeo. A ver si imágenes así se hacen virales y sirven para lo que deben servir, para que todo el mundo entienda lo que no hay que hacer.
El prota canino del primer incidente ha vuelto a nacer.