Desde hace seis años Juan Gancedo lleva una doble vida. Este Policía Nacional dedica prácticamente todo su tiempo libre, sacando horas, recursos y ganas de debajo de las piedras o de donde sea menester, a rescatar perros. Canes abandonados o maltratados, perros que han convivido con lo peor del ser humano y que solo gracias a Juan y a las asociaciones con las que él colabora podrán tener una oportunidad de ser perros queridos.
Juan ha ayudado personalmente a cientos de perros, a tantos que ni puede recordar el número. Y por eso a su alrededor, según bromea, muchos piensan que es un "rarito", que tiene alguna carencia y por eso se vuelca con los animales, pero él no concibe la vida de otra manera. No le sobra el dinero y su coche está hecho polvo por todos los rescates en caminos secundarios, pero nadie le quita la alegría de saber que hace lo que debe.
Porque "la solidaridad no es una obligación, es una oportunidad que te da la vida y en la vida las oportunidades nunca se pierden... si tú no te aprovechas de ella, llegará otra persona y lo hará". Ese es su (gran) consejo, que seamos solidarios. Que mostremos empatía hacia los animales.
¿Quieres echar una pata a Juan Gancedo? Súmate a su teaming aquí.
Juan, conocido como "El Ángel de La Cañada Real", por la cantidad de perros que ha logrado sacar de ese asentamiento, cree que en todo el tiempo que él lleva acudiendo a esta zona deprimida de Madrid la situación asociada al maltrato no ha cambiado apenas. Algo ha mejorado, sí, pero solamente porque muchas familias han sido realojadas.
Hasta que no cambien las leyes el problema seguirá ahí, el maltrato, el abandono, la cría irresponsable...
Y no solo en la Cañada, claro: "En este país se ha normalizado el maltrato. Se ha normalizado que los animales son cosas. Tienen que pasar muchísimos años para que esto cambie."
Porque hay muchas barbaridades que la gente ve como normales, nos cuenta Juan en una entrevista que podéis escuchar al completo al final de este texto.
"A ti te gusta rescatar perros. Te diviertes, es tu hobby",es lo que le decía un amigo a Juan... Un amigo que, evidentemente, no llegaba a entender el fondo de la cuestión. Como ironiza él, "nadie piensa que yo me metí a policía porque me guste ver homicidios o robos, porque me guste ver a la gente sufrir. Está claro que no me he metido en el mundo del rescate porque me gusten las cosas que he visto, he visto muchísimos cadáveres, perros maltratados..."
"El rarito en mi trabajo, el rarito en mi familia, el rarito en mi entorno soy yo. Yo, que soy una persona que veo un animal sufriendo y trato de salvarlo, soy el rarito..."
Y eso que no es fácil, obviamente lo pasa mal ante muchos de los casos con los que se enfrenta. No salva a todos los perros que querría, salva a los que puede, con el dinero que logra recaudar para ello.Igual que las protectoras con las que colabora, porque la situación en lugares como la Cañada Real, según la define Juan, es cercana al Holocausto.
¿Qué hacer ante un caso de maltrato?
El problema, cree Juan, es que hay cosas que no son moralmente correctas pero sí son legalmente correctas. Lo inmoral no es lo mismo que lo ilegal. Para él lo inmoral serían la mayoría de los casos que ve pero no son necesariamente ilegales...
Ante un caso de maltrato su consejo es conseguir pruebas, pruebas temporales, es decir fotos o vídeos que demuestren que lo que tú denuncias está sucediendo a lo largo del tiempo, como un perro encerrado en un balcón... Esto es algo realmente importante para ayudar a que una denuncia pueda prosperar.
¿Cómo logra rescatar a los animales en la Cañada Real?
Lidiando de la mejor manera posible. Él no acude como Policía Nacional sino como rescatista así que, aunque muchas personas allí quizá sí saben cuál es su trabajo, lo que ha hecho en todo este tiempo es entablar relaciones para lograr que le cedan los perros por las buenas. Si se pretendiera hacer de otra forma tendrían que tener 20 coches patrulla allí todos los días, y eso no es viable.
Él acude a la Cañada constantemente, lleva pienso y pipetas para los perros con los que se encuentra, da una vuelta, pregunta... Y así puede localizar a los canes que necesitan ayuda, que necesitan ser sacados de ahí con urgencia.
Algo que empeora el problema considerablemente son las personas que compran perros en internet, esos que buscan perros de raza "pero baratitos... " Esto, según ha podido comprobar Juan, hace que existan esas "fotocopiadoras", las pobres perras que son explotadas pariendo una y otra vez como si fueran máquinas. American Stanford, Yorkies, Carlinos...
La cría indiscriminada es un sórdido negocio redondo que fomenta cualquier persona que acuda a un mil anuncios o a un wallapop a comprar un perro.
Policía y rescatista
Hay muchos escollos en el camino. Una normativa que cambia según la zona en la que estés. Y una falta clara de formación y de protocolos en el ámbito de la policía y los animales. Algo que puede tener consecuencias dramáticas, como todos sabemos.
Juan sí se ha formado, él ha hecho todo tipo de cursos pero es algo que él se ha costeado porque le interesaba, nunca ha recibido ninguna formación oficial como Policía Nacional.
Considera que hay dos cuestiones básicas que ayudarían a los policías: tener formación clara para saber cómo actuar tanto a nivel legal como a nivel de manejo de los animales.
Las lecciones que da Juan con su trabajo cotidiano son impresionantes. Su empatía traspasa la pantalla desde sus redes sociales y eso es justamente lo que él piensa que sería la clave para evitar el abandono y el maltrato.
Nadie te va a recibir como tu perro. Ellos se tirarían por un barranco detrás de ti. Es lo que somos para ellos. Deberíamos darle la vuelta a la tortilla para empatizar con ellos como ellos con nosotros. Hasta que eso no suceda seguirá habiendo maltrato y abandono...
Juan ahora convive con dos perros, con Keko y Kai:
¿Cómo ayudar a Juan?
A través de su teaming, sin duda. Además podéis seguirle en instagram para ir ayudando a los perros que él va rescatando.
Y si alguien tiene una furgoneta que le sobre, también le vendría genial para seguir ayudando, como bromea Juan: Si pudiera conseguir una pequeña furgoneta, llegaría mucho más lejos y podría rescatar a más perros que ahora, con su coche.
Podéis seguirle también en TV porque participa en este programa semanalde cuatro (también contaron con SrPerro hace tiempo, lo podéis ver aquí)
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