Para muchos se trata de un momento devastador y difícil, un momento que -además- es complicado de afrontar y explicar en el entorno laboral: los que no comparten su vida con un perro pueden no empatizar o entender la profunda tristeza que se siente ante su pérdida. Eso hace que sea un duelo aún más complicado,se generan sentimientos de culpa, incluso de vergüenza, por sufrir tantísimo dolor.
En EEUU algunas empresas, aún pocas, empiezan a reconocer que la pérdida de un animal de compañía requiere un proceso de duelo y por ello permiten a sus empleados varios días de permiso (pagado) para que puedan empezar a afrontar esa despedida.
Los perros nunca mueren, duermen junto a tu corazón
Hay estudios que reflejan que hasta un 30% de los dueños de animales de compañía experimentan un periodo de duelo que puede durar hasta 6 meses. Y aunque es menos frecuente, hasta un 12% puede llegar a sufrir crisis más severas. Para una mayoría (68%) lapérdida de su animal de compañía fue más difícil de afrontar que la de un familiar o amigo.
Como nos explicaba la psicóloga Vanessa Carral, de Dogtor Animal: "Parece que el amor distinguiera si perdemos a un padre o a una madre que si perdiéramos a un animal de familia. Y realmente, biológicamente hablando, bioquímicamente hablando, nuestro cerebro cuando ama no distingue si el ser amado es un ser humano o un animal. Nuestro cerebro va a segregar las mismas sustancias, nuestras células van a reaccionar de la misma manera."
Ese dolor tan visceral no es algo que haya que explicar a un humano perruno. Y sin embargo es frecuente que los que no comparten su vida con un perro (o un gato) no lo entiendan. Para ellos "es sólo un animal", para ellos "no es normal" que una persona esté hundida por esa razón.
En un interesante artículo del Wall Street Journal explican que muchas personas no se atreven a pedir un permiso laboral cuando muere su perro o su gato: sienten vergüenza...Si su empresa no está relacionada con los animales o no es pet friendly, temen que sus jefes no lo entiendan y que eso sea perjudicial para su carrera.
¿Cómo afrontar esa crisis en el trabajo?En EEUU algunas empresas están empezando a reconocer la necesidad de tener en cuenta ese duelo. Son pocas, sí, pero la tendencia llama la atención por algo, porque nuestros animales son, cada vez más, parte de la familia y el efecto de su pérdida puede resultar igual de devastador que el de de una persona.
Esta tendencia podría -esperamos- ir en aumento aunque sólo sea porque el coste de no implementar políticas en este sentido podría ser mayor.
En San Francisco, Kimpton Hotels & Restaurants tiene una política clara, hasta tres días de permiso para los que hayan perdido a un animal de compañía.
VMware, una empresa de software, tiene una política de permisos por fallecimiento que incluye a humanos y a animales por igual.
En Mars Incorporated, la empresa que engloba a Mars Petcare (con marcas como Royal Canin o Pedigree) tienen permisos de un día ante la muerte de un animal de compañía, explican en ABC News.
En Ben & Jerry's no tienen una política oficial pero dado que se trata de una empresa que es oficialmente perruna, tienen claro que si un empleado pide algunos días de permiso por esta razón, se le concedería.
No hay ningún tipo de legislación al respecto, tampoco en EEUU, y los expertos tienden a pensar que podría ser un problema fomentar este tipo de permisos laborales en algunas empresas.
Si no son del sector o no tienen políticas para integrar a los animales de compañía en las oficinas, entonces muchos compañeros de trabajo podrían ver como algo del todo excesivo que algún compañero pudiera beneficiarse de uno o dos días de permiso pagado por la muerte de su perro.
