Hace unos meses Orlando Bloom compartió su absoluto dolor ante la pérdida de su compañero perruno, el pequeño Mighty. Desolado y roto, se tatuó su nombre y un corazón sobre el suyo propio:
Era más que un compañero. Era una conexión espiritual, eso es seguro. Lo siento. Te quiero. Gracias. DEP mi PODEROSO CORAZÖN mi pequeño compañero A ♠ ️
Ahora el actor ha compartido un nuevo mensaje perruno de lo más bonito y, además, con efectos secundarios de los buenos porque dado que tiene un número de seguidores brutal, cualquier cosa que él pueda recomendar es mejor que muchas campañas de publicidad juntas.
Y Bloom ha publicado una foto que es todo ternura para explicar lo que para él ha significado el convertirse en casa de acogida para este pequeño con suerte, Buddy...
Y a través de esa foto y de sus palabras el actor ha hecho una gran labor: porque él ha elegido ser casa de acogida para un mestizo de a saber, porque explica que aunque nadie podrá nunca reemplazar a su gran amor perruno, Mighty, este pequeño ya ha conseguido completar su corazón. Y anima a todos a ser casa de acogida, mostrando como ejemplo el cambio que ha dado Buddy, ahora que está a su vera.
Todo eso es importante porque las casas de acogida son cruciales tanto en EEUU como en España para las protectoras, gracias a ellas salen adelante cachorrotes o perros enfermos cuya salud correría peligro en los cheniles, gracias a elllas muchos canes aprenden a vivir en familia y así tienen muchas más oportunidadades de ser adoptados, gracias a ellas hay hueco para salvar a otro perro en esa protectora...
Si tienes ganas de apoyar a los que se desviven por ayudar a los animales, no lo dudes, habla con las protectoras en tu ciudad porque todas, siempre, buscan casas de acogida.
En este precioso vídeo (una versión ilustrada de un poema de Diane Morgan) rinden homenaje a todas esas personas que dan el paso y deciden ser casa de acogida, personas que deben ser a la vez todo dulzura y todo dureza porque saben que cuidan de un animal al que querrán con locura y del que tendrán que despedirse. Son puentes entre lo que fue y lo que podrá ser, son el camino hacia una nueva vida para esos animales.
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