Enero 2019, hace frío pero tampoco tanto en Barcelona. Y ha habido muchos días de sol en diciembre. Es decir, es otro efecto del cambio climático: por eso mismo la oruga procesionaria ha hecho acto de presencia ya en la ciudad. Según informan en BTV, en algunos parques de la ciudad de manera bastante llamativa: en Horta-Guinardó, Nou Barris y Sant Martí la afectación ha aumentado considerablemente respecto al año pasado. En Sant Andreu, Gràcia y en Sarrià - Sant Gervasi se mantiene estable y ha disminuido considerablemente en Ciutat Vella, Sants-Montjuïc y les Corts. Así que mucho ojo en los paseos por toda Barcelona y en caso de ver procesionaria podéis comunicárselo al Ayuntamiento: @bcn_ajuntament @BCN_Ecologia
En estos artículos podéis consultar todo lo relativo a estas peligrosas orugas a las que hay que evitar a toda costa:
Y en caso de ver alguna "procesión", contactad con el Ayuntamiento:
