Ya os hemos hablado otras veces de este pequeño gran perro, de Nero. Él y Jarvis, su compi canino, son dos salchichas adoptados y residentes en el Reino Unido. Ahora son una pareja bien avenida, gracias a la paciencia y a los esfuerzos constantes de su familia humana. Pero también tienen su historia individual y la de Nero, también conocido como "el cohete de bolsillo" merece ser contada y compartida. Porque no sólo los galgos o los canes grandes disfrutan del canicross, este salchicha triunfa a la carrera, tal y como nos cuenta Jessie. Nero se lo pasa en grande demostrando que él también es un srperro veloz.
"Cuando adoptamos a Nero buscábamos un nuevo miembro para nuestra pequeña familia de dos, lo que no nos imaginábamos era encontrarnos con un atleta. Nero es un teckel cruzado con… alguna raza tremendamente energética, y aunque tiene el hocico y el cuerpo alargado de los salchichas, sus patas son las de una gacela: largas, y con ganas de velocidad.
Nero es el típico que en el parque hace que los demás le persigan, y en el campo en cuanto algo sale corriendo a gran velocidad, no para hasta que pierde de vista al objetivo.
Hace años una veterinaria con ganas de dar diagnósticos erróneos, nos dijo que Nero tenía problemas del corazón y le puso un tratamiento con pastillas para toda la vida. Como el diagnostico no nos quedaba muy claro, viajamos de Málaga a Cádiz a visitar a los estupendos veterinarios de Clinica Plaza de España donde hicieron todos los tests posibles para asegurarnos que Nero no sólo no tenía problemas de corazón, sino que estaba hecho para correr.
Desde que nos hemos mudado al sur de Inglaterra donde hace mucho sol y hay mucho campo, Nero, ahora con alrededor de 9 o 10 años (es de edad indefinida) se ha hecho aficionado al canicross.
Con Rob, uno de sus humanos, ha competido en carreras en el barro, por montes y bosques, y este domingo corrió su primera media-media maratón. Rob se detuvo a medio camino para recoger a Nero y cruzaron la línea de meta entre los primeros 70.
Nero no sólo no jadea casi nunca, es que en estas carreras le gana a labradores, collies, staffies y otros perretes del grupo ganándose el mote de “pocket rocket” - cohete de bolsillo -, y también ha aparecido en una revista deportiva.
A mi me está ayudando a entrenarme para correr largas distancias, aunque creo que el pobre se desespera, adelantándome una buena distancia y esperando en plan, “Jessie, ¿llegas ya o qué?”
Correr con un perro de tamaño tan diminuto nos ha traído críticas de desconocidos que piensan que obligamos a Nero a correr. No saben que es al contrario, el que nos saca a patear el barro es el perro.
Sólo corremos en terrenos que son delicados con las almohadillas de sus patas, y sólo salimos con Nero cuando él quiere. Cada vez que ve el arnés especial para correr se emociona muchísimo, y desde que Rob y él hacen canicross tienen una relación, si cabe, más cercana, con su ritual de estiramientos, abrazos y cariñitos postcarrera.
Nero tiene una dieta estupenda y cada vez que corre recibe recompensas en forma de frutas y galletas caseras preparadas por Rob. Nero odia estar encerrado en casa, y en la ciudad sufría problemas de ansiedad por el ruido. Desde que hace canicross se ha vuelto más tranquilo con perros grandes - schnauzer gigantes, huskies- y al ser más sociable su ansiedad se ha reducido.
Hay perros que están “diseñados” para el sofá, otros para trabajar de guías, otros para cuidar ovejas, pero todos están hechos para sacar lo mejor de cada humano al que acompañan.
Nero hace eso cada día, corriendo con nosotros o cuando nos obliga a dejarlo todo para que le rasquemos la barriga. Nuestro cohete de bolsillo es nuestro héroe personal."
PD: Podéis seguir las aventuras de Nero y su compi perruno Jarvis en Instagram
