Verso es un cachorro de labrador que "estudia" para ayudar a niños con autismo. Es un can de la Fundación Bocalán que, por ahora, vive junto a la persona que se está encargando de su socialización, Isabel Llorens. Y ella es la que ha compartido en sus redes sociales esta noticia que merecería salir solamente en El Mundo Today y no en medios nacionales: ha sido multada por pasear por una playa de Cádiz con el can, por mucho que fuera debida y correctamente identificado como perro de asistencia en entrenamiento. Según los agentes, el peto podía ser falso. Sin comentarios.
"La Excelentisíma Diputación de Cádiz ha desestimado mis alegaciones y sin ningún tipo de complejo me ha MULTADO por estar en la playa de la Barrosa a las 9 de la mañana el pasado verano con UN PERRO DE ASISTENCIA de la Fundación Bocalán que se estaba preparando para asistir a un niño autista. Los 2 agentes me echaron de la playa bajo amenaza de detenerme si no me iba con la perra a pesar de estar en mi derecho. Ahí lo dejo. No hay palabras. La junta de Andalucia debe hacer algo. Esto es inaudíto", denuncia Llorens en Facebook.
El Diario de Cádiz también ha publicado la noticia que así, sin duda, tendrá mucha más repercusión. Aunque basta echar un ojo a los comentarios que han ido dejando en las últimas horas para entender todo el camino que queda por andar y lo mucho que hay que concienciar aún sobre la labor de los perros de asistencia.
"El tema no es pagar o no los 150 euros, sino establecer unos mínimos de concienciación y sensibilidad. Porque no parecer ser el único caso, "en la ONCE me han dicho que han tenido también alguna incidencia parecida, incluso con una entrenadora", recalcaba Llorens a este diario.
Con respecto a la multa, el problema es que en Andalucía no hay aún una normativa especfíca para los perros de asistencia, tan solo para los perros guía, por lo que Verso, a ojos de la ley, es un perro "normal y corriente", no un can que está en proceso de aprender a comportarse bien en todas las situaciones posibles antes de comenzar su entrenamiento como fufuro ayudante de algún niño con autismo.
Aquí tenéis al guapo Verso, en clase: