Hay una nueva recogida de firmas en Change.org para intentar controlar el uso y el abuso de los petardos y de toda la pirotecnia.Está dirigida al Ministro del Interior, en genérico, y seguramente con la esperanza de que se interese personalmente por el tema, también en concreto al actual titular de esta cartera, a Fernando Grande-Marlaska -conocido por ser muy perruno. Y decimos una nueva porque hay recogidas de firmas dirigidas al Ayuntamiento de Barcelona, al de Bilbao, a la Junta de Andalucía.
Claramente es un problema grave y generalizado que no solo afecta a los perros, también a niños y mayores, a muchas personas con sensibilidad extrema a los ruidos, a otros animales... De ahí que esta nueva iniciativa, acompañada por una primera concentración en la Plaza de Jacinto Benavente, tenga mucho sentido: es algo que debería regularse a nivel nacional.
Aquí podéis leer y firmar la petición "Por una Ley que regule la Pirotecnia".
Hay épocas del año que son una pesadilla para los perros: sienten tal ansiedad que salen corriendo, muchos se pierden o se hacen heridas al tratar de escapar, son atropellados... y todo ello es debido a los petardos y demás estruendos asociados a ciertas, demasiadas, fiestas. Es como si fuera imposible divertirse sin explosiones de ruido.
Victoria Lacalle es quien ha decidido pasar a la acción para lograr que en España haya una ley que regule la pirotecnia. Y ella también es quien está organizando la primera concentración, el domingo 21 de octubre en la Plaza de Jacinto Benavente de Madrid.
"Empiezo la lucha para acabar con ella. Recogida de firmas, concentraciones, presentación de proyectos en Aytos etc.
Espero que todos los que sufrís a causa de ella me apoyéis y forméis parte de ello porque las quejas durante las fiestas sirven de poco."
Pinchando en el cartel encontráis la cita con el evento en Facebook.
Esto es lo que detalla en la recogida de firmas, un alegato muy detallado y documentado sobre los efectos de los petardos sobre animales y humanos:
"Los resultados reales son tremendos, hay que tener en cuenta que los perros escuchan hasta los 60.000hz, mientras que el humano a partir de 20.000hz no llega a oír nada. Los petardos y otros instrumentos crean directamente lesiones en nuestras mascotas que en ocasiones acaban en fallecimiento por paro cardiaco y situaciones de escape (se calcula que la noche de San Juan hay entre 3 y 4 veces más avisos que una noche normal), pero es importante mencionar que el grupo con más bajas aunque menos contabilizado es el de las aves, que caen de los nidos, huyen desorientadas falleciendo por paros cardiacos o golpeadas…
Fabulosa campaña para que los humanos entiendan cómo sufren los perros por los petardos
En los humanos tenemos crisis de ansiedad que implican doblar la medicación durante las fiestas “previsibles” sin ninguna necesidad médica, más de cien muertos directos en 25 años por causa de la pirotecnia, pero miles de heridos y amputados entre los que encontramos lesiones estéticas (quemaduras) pero también amputaciones de dedos y manos, vaciamiento de ojos, entre los daños más “comunes” (podemos recordar en Valencia 138 heridos en 2011 en un único día de fiesta, 165 en 2006 que incluía un bebé de 15 meses, un niño de 9 años desangrado tras la explosión de un petardo en alicante en 2013…).
Por todo ello, estimamos que el control de la pirotecnia, circunscribiéndolo a situaciones puntuales autorizadas, es no sólo posible, si no imprescindible dada la situación real en la que nos encontramos, el peligro social que conlleva, la falta de control existente, la imposibilidad de su control de otra forma, y las consecuencias totalmente nocivas e innecesarias, teniendo en cuenta que en otros lugares del mundo, no está controlado, está directamente prohibido (Más de mil ciudades en Italia, Cientos de ciudades y varias provincias en Argentina son sólo dos ejemplos). La diversión no puede implicar dolor y sufrimiento."
Y esta es la propuesta:
* Prohibir hacer estallar en la vía pública o en cualquier espacio al aire libre, petardos, cohetes, tracas y artificios pirotécnicos similares sin que exista autorización previa administrativa y con los controles pertinentes.
* Cualquier actividad pirotécnica en fiestas populares requerirá la preceptiva autorización de la administración competente que incluirá un proyecto con las medidas para evitar accidentes y molestias a las personas y animales o daños a las cosas.
En cualquier caso los establecimientos de venta de productos pirotécnicos no podrán vender los artículos pirotécnicos sin la presentación de la preceptiva autorización otorgada al comprador que siempre ha de ser mayor de 18 años debiendo colocarse en lugar visible la autorización administrativa de venta de productos explosivos.
* Para garantizar la seguridad pública se autorizará con carácter preferente el uso de artificios pirotécnicos sin ruido y se potenciará el uso de los mismos frente a otros artículos que no reducen las molestias acústicas."
Aquí podéis leer y firmar la petición "Por una Ley que regule la Pirotecnia".
PD Compartimos los consejos prácticos de Pat Educadora Canina, unas pistas que -en paralelo a las movilizaciones- también son de ayuda para vuestros canes.