El Proyecto HUCI -humanizando los cuidados intensivos- es impresionante: derrochan saber hacer, energía positiva, bondad, optimismo, ganas... pero sobre todo, humanidad. Y por eso mismo, porque se preocupan realmente por el bienestar de cualquier paciente que esté a su cargo también entienden a la perfección la importancia del vínculo entre las personas y sus perros. Saben que tiene efectos beneficiosos a muchos niveles y por eso ellos fomentan, siempre que pueden, esos encuentros tan emotivos y maravillosos entre enfermos de la UCI y sus canes. #paseosquecuran, sin duda.
Porque el cariño también cura: desde hace año y medio DOGSPITAL reúne a pacientes con sus perros
“El médico a veces cura, pero cuando no seamos capaces de curar, debemos saber acompañar. Es tanto o más importante que el poder curar”. Y ahí también entra esa humanidad que hace posible que una enferma terminal pueda reunirse con todos sus seres queridos, con sus perros también.
Las historias perri-humanas que comparten los responsables de HUCI son tan emotivas como positivas. Si hace tiempo pudimos conocer cómo Enric, un hombre que llevaba cuatro meses hospitalizado, logró recobrar la sonrisa al acariciar de nuevo a su perra, a Blanca, ahora vemos una cara igual de feliz, la de Pilar.
Gracias a HUCI ha podido disfrutar de una compañía clave para ella, la de sus dos canes, Don y Bruno. Esa #Benditalocura que dicen ellos, la que marca la diferencia, tiene que ser contagiosa.
Si queréis saber qué más cosas hacen desde HUCI -y merece la pena- en su web encontráis muchísima información al respecto.
Los #paseosquecuran no necesariamente tienen que ver con los perrospero siempre son una influencia positiva: salir del hospital, ver el sol, la luz...