El aumento de las temperaturas, los veranos cada vez más calurosos y con episodios de calor extremo hacen que sea crucial concienciar sobre el grave riesgo que supone para los perros -especialmente para ciertas razas- el golpe de calor o hipertermia.
Un nuevo estudio del Royal Veterinary College en el que han analizado los datos de más de 160.000 perros que fueron atendidos de urgencia en 2022 ofrece información muy relevante sobre las razas más afectadas así como sobre las circunstancias en las que se desató ese golpe de calor.
La alerta es máxima si tenemos en cuenta que la tasa de mortalidad sigue aumentando,es decir, cada vez más perros sufren golpe de calor y fallecen.
El golpe de calor es potencialmente fatal para los perros: ocurre cuando la temperatura corporal central aumenta hasta el punto en que el animal ya no puede termorregularse efectivamente sin ayuda para regresar a una temperatura corporal segura.
La hipertermia puede conducir a inflamación sistémica, disfunción orgánica y, eventualmente, la muerte si no se trata de manera urgente y efectiva. En este sentido es crucial destacar las últimas investigaciones que se han publicado en las que se aboga por un cambio claro en la forma de actuar ante un golpe de calor: refrescar primero y luego ir al veterinario.
Los factores de riesgo identificados incluyen la raza, un mayor peso corporal en relación con la media de raza/sexo y tener más de 2 años de edad. Las razas braquicéfalas y los perros de más de 50 kg también tenían un mayor riesgo.
En cuanto a las razas, que han plasmado en una infografía que podéis consultar o descargar aquí, los Terranova, Chow Chow, Bulldog Inglés, Bulldog Francés y Carlino encabezan la lista de perros con más riesgo de sufrir golpe de calor.
Lo preocupante, dada su popularidad, según recalcan los investigadores, es que sólo dos razas, el Bulldog inglés y el Bulldog francés, representaron el 36,98% de todos los casos de golpe de calor en este estudio.
Múltiples estudios han identificado el esfuerzo como el desencadenante más común para un golpe de calor y han encontró que las razas braquicéfalas tienen un riesgo particularmente alto.
Los datos de este estudio muestran que el ejercicio es el principal detonante de los golpes de calor,seguido por el calor ambiental estando en el exterior. Es decir, por lógica, es clave evitar que los canes jueguen demasiado vigorosamente o hagan ejercicio en momentos en los que hace calor.
Esto sugiere que los tutores, especialmente de perros braquicéfalos o de doble pelaje, deberían considerar enfriar activamente a sus perros como medida preventiva estándar durante períodos de temperatura ambiente alta.
Las alertas sobre calor extremo para las personas son útiles igualmente para los perros. Es lo que han podido comprobar también en este estudio puesto que 5 veces más perros acudieron a urgencias durante esos momentos.
Aquí podéis encontrar información práctica para saber cómo actuar para evitar un golpe de calor y qué hacer en caso de que se produzca: