Ese momento ¿'juegasjuegas'? O más bien ¿'juegasjuegasjuegasjuegassssssssjuegas'? que todos conocemos.
Esas miradas llenas de ilusión que nunca pierden la esperanza... porque, claro, el 99% de las veces caemos y, efectivamente, jugamos aunque sean las siete de la mañana y esté lloviendo.
Por eso me ha gustado tanto este vídeo de un can tratando de enseñarle a un bebé el asunto del tú me lo tiras y yo te lo traigo, prometo.