Este vídeo tiene efectos secundarios: por un lado genera espíritu navideño y una buena dosis de felicidad perruna en los humanos que lo ven. Y por otro, algo aún más importante, se convierte en comida para canes de protectoras.
Los nuevos ayudantes de Papá Noel son perros y gatos adoptados requeteguapos, además de estupendos actores. Aunque estos regalos lleguen a su destino con algún pelo extra, merece la pena :-)
La gran mayoría de los protas del vídeo ya tienen hogar, pero no todos: algunos viven en una protectora de Salt Lake County, a la espera de que esta Navidad alguien decida compartir su casa con ellos.
Lo bueno es que Freshpet, la marca de pienso que está tras el anuncio, ha prometido que cada vez que este genial vídeo sea compartido, ellos donarán una comida a algún can en las protectoras con las que ellos colaboran.
Y aquí podéis ver el making of, el vídeo en el que nos muestran cómo han rodado el spot de los elfos perri-gatunos.