Es su pose favorita: Baloo, el minino, se coloca en la cabezota de Henry, el can, y se convierte en " El gato sombrero" :-) Y así, juntos, exploran el mundo y disfrutan descubriendo los espectaculares parajes por donde se desarrollan sus caminatas. Sus humanos se mudaron a Colorado para poder emprender rutas en la naturaleza todos los fines de semana y ahora nunca van solos, con ellos siempre está esta pareja tan bien avenida.
Cuando Cynthia Bennett y su novio estaban pensando en adoptar, un gran cachorrote los adoptó a ellos: Henry tenía algo más de tres meses pero era mucho más grande que todos los que había a su alrededor y por eso se fijaron en él. Cuando entraron en su chenil el perro no lo dudó, se acercó hasta Cynthia y se encaramó en su regazo, mostrándole su barrigota. Obviamente en ese instante decidieron que él sería el nuevo miembro de su familia.
A los tres días de adoptar a Henry ya se lo llevaron de acampada, cuentan en The Dodo. Y desde entonces, no han parado. Desde el principio vieron lo mucho que él disfrutaba encaramándose a riscos y deambulando junto a ellos en sus largas caminatas.
Entonces, tiempo después, decidieron volver a ampliar la familia. Y de nuevo optaron por adoptar, algo que para ellos es importante recalcar.
Tras mucho buscar -querían un gato que pudiera unirse en sus aventuras- encontraron al pequeño Baloo. No siempre es así de fácil pero en este caso lo de Baloo y Henry fue inmediato: en cuanto se conocieron, se hicieron inseparabales. Y desde el primer día Baloo dejó claro que él quería ir donde fuera Henry.
Así comenzó su nueva historia, la historia del Gato Sombrero que ahora nos van narrando fin de semana a fin de semana, escapada a escapada, a través de su cuenta de instagram.
Verles juntos es una maravilla...
Cuando Baloo se cansa... también disfruta así, yendo a hombros de su humana :-)
Les esperan nuevas aventuras así que nada como seguir su instagram para poder estar al tanto y para suspirar de envidia ante los sitios que visitan, todos juntos.
Además de darnos envidia, inspiran porque sus humanos son solidarios y siempre que pueden echan una pata a otros animales menos afortunados.
