Paco es un Pinscher de siete años que ha sobrevivido a una aventura inusual y dramática: él cayó a un pozo abandonado de diez metros de altura, un pozo en el que ya habían caído otros animales, cuatro jabalíes. La familia del can avisó angustiada a la Guardia Civil y así fue como se pudo organizar este rescate animal múltiple: con bastante dificultad, todos pudieron ser sacados de ese agujero y están a salvo.
Visiblemente angustiados, y tras recorrer unos tres kilómetros buscando ayuda, los dueños de Paco lograron dar aviso a la Guardia Civil en Almería: explicaron que el pozo donde había caído su perro estaba a unos 400 metros de la playa Carnaje, en Nijar.
Trasladados al lugar, los agentes observan que efectivamente en el fondo de un pozo de unos diez metros de profundidad y 2,5 metros de diámetro estaban el can y cuatro jabalíes, todos ellos vivos, en claro estado de estrés y desesperación.
Tras estudiar las posibilidades de rescate, deciden en un primer momento sacar al perro y para ello, y ya presentes en el lugar efectivos de Protección Civil de Níjar y Agentes de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, los profesionales descuelgan por la pared del pozo a un miembro de Protección Civil que consigue salvar al animal.
Según explican desde la Guardia Civil, Paco está bien y su familia ha agradecido emocionada el esfuerzo empleado para salvar al can.
Posteriormente y con la ayuda desinteresada de ‘Solo Vertical - Guías de Montaña’, que aporta el material necesario y el personal técnico, se realizan de forma simultánea descensos por la pared del pozo para, mediante un lazo con pértiga (dotación de la Patrulla de la Guardia Civil), subir a los jabalíes a la superficie.
El propietario del terreno ha sido denunciado por la Guardia Civil puesto que ese pozo, esa excavación tiene que ser bien señalada para que no se convierta en una trampa que podría haber sido mortal.