El perro de Miguel se llama Zar, es un acuático y simpático Golden Retriever de tres años y medio que disfruta de la vida y disfruta aún más, lógicamente, en compañía de su humano. Y Zar tiene la suerte de que sea un sentimiento mutuo. De ahí la pregunta que encabeza este texto, que es retórica pero real, porque es justamente lo que le ha sucedido a Miguel recientemente.
Esto es lo que ha contado Miguel: la condición para que pudiera llevar a su perro con él -a una casa privada, no a un hotel- era que fuera siempre atado. No porque Zar tenga algún problema de comportamiento o porque sea muy trasto. No, era porque su mera presencia molestaba a algunas personas...
Estancia vacacional; condiciones:
— miguel dieguez 💚 (@dieguez_miguel) June 24, 2021
“no, el perro tiene que estar atado todo el rato porque molesta a X y a X”.
“Ok, no voy, sino os importa. Tengo pocos días y quiero disfrutarlos”.
Entiendo que haya gente que le molesten (en serio);
lo q no entienden es que lo prefiera a él🙋🏻♂️
Ante ese plan tan poco placentero para Zar y para él, Miguel optó por no ir.
Lo "curioso" es que esas personas no entendieron su decisión. No les parece lógico que un humano perruno elija la compañía de su can para ser feliz, para disfrutar.
Porque esa es la cuestión: no se trata de que tengamos que ir con nuestro perro a todos, todos lados, obviamente -hay incontables lugares donde ellos no están cómodos o donde lo pueden pasar mal- pero es igual de obvio que disfrutamos el doble cuando podemos hacerlo en compañía de nuestro can. Más aún en vacaciones.
Y tú disfrutas más cuando tu perro disfruta, eso es así.
Si acabaré bloqueando en la vida real 😂😂 https://t.co/QSmrog6dMV
— miguel dieguez 💚 (@dieguez_miguel) June 24, 2021
En la cuenta de twitter de Miguel se ha montado un debate curioso a raíz de esta anécdota.
Un debate que se divide entre los que entienden que el vínculo entre personas y perros es de vital importancia para quien tiene la suerte de haberlo establecido y entre los que piensan que los perros molestan. Que restan en vez de sumar. Que son un incordio.
Conste mi reflexión no va por criticar a quien no le guste: lo entiendo! Pero ellos se cabrean si les digo “no mira, prefiero quedarme, antes de tenerlo todo el día atado, no voy”. Y disfruto más con el.
— miguel dieguez 💚 (@dieguez_miguel) June 24, 2021
Pues nada… no lo entienden (me importa cero).
Pinchando en la imagen podréis leer el hilo completo de comentarios que, por suerte, se decantan claramente del lado de las personas que entienden que los perros son familia (a veces incluso mejor que la familia) y que su presencia hace a sus humanos más felices.
Qué suerte tiene Zar y qué buena elección la de Miguel, ¡de buen pestiño de vacaciones se ha librado! :-)
PD Si quieres saber dónde seréis bienvenidos tu can y tú en Madrid y Barcelona, ¡los libros de SrPerro tienen la solución! :-)
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