No es un disfraz, no es un abrigo perruno sin más, es una "armadura para perros pequeños", Doggy Armour, un producto que se ha empezado a comercializar hace poco en el Reino Unido con el objetivo de proteger a los perros más pequeños de los ataques y mordiscos de otros canes.
La inspiración para este peculiar invento surgió porque Tilly, la perra del inventor, estuvo a punto de ser atacada un par de veces, cuenta él, y quería protegerla...
Él decidió crear una prenda ofreciera algún tipo de barrera ante los posibles bocados de otros perros...
Estas chaquetas armadura, por llamarlas de alguna manera, ofrecen protección contra mordiscos en el cuerpo y en el cuello utilizando una tela que es similar a la que se usa en los chalecos anticorte que se fabrican para humanos.
La más pequeña cuesta unos 72 € y están disponibles en tres tamaños.
En el vídeo demuestran lo resistentes que son (de una manera un poco peculiar.)
Doggy Armour, explican, está diseñada para minimizar el daño que pueda sufrir un perro si es atacado pero no garantiza que no reciba ningún mordisco.
En EEUU hay una versión aún más extrema, pensada para proteger a los canes de los ataques de los coyotes y, de propina, también de otros perros más grandes.
Se puede usar con y sin los penachos fosforito, con y sin los pinchos...