Es una triste realidad en todo el mundo: hay gente sin escrúpulos que trata a los perros como mercancías, que cría de forma masiva e indiscriminada, sin tener nunca en cuenta el bienestar de los animales y sólo buscando rentabilizar al máximo el tirón de ciertas razas. La lucha contra las llamadas "Puppy Mills" o "Granjas de Cachorros" es constante desde hace años y por eso protectoras como la Humane Society de EEUU comparten historias como la de Daniel.
Este cachorrote, ya lo veréis en el vídeo, fue rescatado junto a casi 300 perros de un criadero ilegal donde encontraron a los animales en una situación dramática.
Debido a la desnutrición, Daniel había perdido el uso de sus patas delanteras. Creen que no había visto la luz del día desde que nació, le faltaban vitaminas, le faltaba de todo. Pero Daniel tenía ganas de vivir, muchas... lo demostró desde el primer momento en que se arrastró, como pudo, hacia las personas que venían a salvarle. Y a partir de ahí fue mejorando a marchas forzadas.
Ya veréis cómo está ahora, ¡un bellezón!
En Europa también hay granjas de cachorros, las noticias suelen saltar coincidiendo con la campaña navideña: perros que son ilegalmente importados desde países del este, también a España, saltándose los controles y todas las normas. Cachorros de raza que luego son vendidos en tiendas de animales.
Y mientras, hay miles de perros de todos los tamaños, edades y colores esperando que alguien les de un hogar. Lo malo es que en España, según los datos de la Fundación Affinity, la adopción sigue siendo la última opcióncuando alguien piensa en tener perro.
¿Cómo lograr dar la vuelta a esa estadística? Corriendo la voz, difundiendo, concienciando a cuanta más gente mejor sobre la adopción.
Si te gusta una raza concreta puedes buscar protectoras que trabajen específicamente con esa raza.
También puedes comprar, claro, pero en ese caso es primordial que te informes muy bien y que encuentres a un criador profesional que ofrezca todas las garantías. Nunca compres perros por internet, nunca te fíes de los presuntos chollos. Visita las instalaciones del criador, preocúpate por conocer a la madre de tu cachorro, mira cómo viven, pregunta, pregunta y pregunta.
Si no lo haces, si compras un cachorro por impulso en cualquier tienda de animales... ya sabes lo que hay detrás.
