No me extraña que se diga que el sentido común es el menos común de los sentidos. A pesar de las incontables campañas sobre cómo lograr que los perros estén tranquilos en épocas de petardos o de fuegos artificiales -algo que en EEUU sucede en torno a las celebraciones del día de la Independencia, el 4 de julio-, a pesar de los avisos sobre lo mal que lo pueden llegar a pasar los canes cuando hay estruendos o petardos, un hombre decidió que era buena idea gastar una "broma" a su perra así.
Su hija grabó el momento y lo compartieron en facebook, como si todo fuera un chiste súper divertido. Y no, claro, no lo es. De hecho, las imágenes no tardaron en saltar de muro en muro hasta hacerse virales y la policía de Atlanta, menos mal, tampoco tardó en tomar cartas en el asunto y visitar al dueño del can.
La perra estaba bien cuidada, por eso no se la han retirado, pero sí le han acusado de maltrato animal y de no haber registrado a su perra en el ayuntamiento, una mestiza de Husky de 4 años. Por eso mismo le ha caído una multa de 500$.
Al menos la pobre perra no sufrió ninguna quemadura por la presunta broma.
Los que tiran petardos a diestro y siniestro -esperamos- no harían algo así... pero insistimos en recordarles que lo que ellos consideran divertido hace sufrir de manera innecesaria a incontables animales.