Se llama Antón y vive la vida perra en Valencia con sus tres hermanos canes y dos humanos.
Se llama Antón y tiene solo tres patas porque tuvieron que amputarle una: cuando APA Más Vida lo encontró estaba malherido, con una pata rota y absolutamente esquelético... otro desecho de la caza, otro animal que solo había conocido lo peor del ser humano.
Él, como buen perro, eligió olvidar el pasado y el maltrato y el dolor: pronto comenzó a correr, con sus tres patas.
Gracias a la protectora que lo rescató y cuidó, a la casa de acogida que lo mimó mientras se recuperaba y gracias a la familia que finalmente lo adoptó, Antón es hoy un perro feliz.
Y quizá os suene su trufa y su porte porque Antón también es el Galgo cuyo retrato aparece en los autobuses que han recorrido Madrid y Barcelona para exigiral PSOE que retire la enmienda de la verguenza con la que pretenten dejar fuera de la Futura Ley de Bienestar Animal a los perros de caza y trabajo.
Andrés López, el autor del impactante retrato que encabeza este texto, ha contado en twitter la historia de esa foto que muchos han insistido en denunciar como retocada o falsa, la historia de un perro que es un símbolo pero que es real, muy real... porque el maltrato y el abandono que sufren miles de perros de caza (y muchos otros canes) no tiene nada de ficticio.
Así que, ya sabéis, haced caso a Andrés: si veis a Antón, sacadle una foto y compartidla en redes con la etiqueta #mismosperrosmismaley para exigirle al PSOE que sea coherente y no cree una ley con perros de primera y perros de segunda, una Ley de Bienestar Animal que deje sin protección a los perros de caza.
Te puede interesar
