Hay que recoger las cacas de nuestro can, es casi el mandamiento número uno para cualquier humano perruno y a la mayoría de dueños de canes responsables y cívicos no le parece un problema pero, peeeero, está visto que el asunto de las heces obsesiona a ciertas personas y llega a inspirar unas "soluciones" un tanto dramáticas. ¡Pobres canes!
Confieso que esperába descubrir que Piqapoo era una inocentada o, aún mejor, una original campaña para mostrarnos a todos que recoger las cacas de tu can no es tan complicado.
Pero no, -a diferencia de ese otro proyecto tan, tan interesante de la app para recogedores de cacas- este artilugio es real:han recaudado más de 35.000 $ en Kickstarter y se vende a través de indiegogo donde ya han conseguido otros 66.000$ así que es evidente que miles de humanos apuestan por colocarle este artilugio a su (pobre) perro.
Es una especie de pinza que le colocas al can en la cola para que... atrape las cacas en una bolsa.
Si alguien le coloca esto a su can dudo que su can sea capaz de resistir la tentación de mandarle a paseo (por no utilizar otra expresión más apropiada en este contexto) pero según sus creadores, para nada, tu can puede tardar unos minutos o unas horas, pero se acostumbrará... ahá.
Parece evidente es que ciertos humanos quizá deberían de abstenerse de tener perro si están considerando seriamente artilugios como el Piqapoo o este otro "invento", el Pootrap, que es aún más surrealista.
Es como un arnés a la inversa que le colocarías a tu (pobre) perro con una bolsa para recoger sus cacas.
En serio, no es una broma aunque lo parezca...
No os perdáis el hilarante anuncio vintage hecho en Taiwán... es casi como una comedia para perros.
¿De verdad es tan complicado agacharse un momento a recoger una caca de perro?