Desde 2019, The Dog Aging Project, (El proyecto del envejecimiento canino) recopila datos sobre miles de perros de todas las edades, tamaños y razas diferentes para tratar de identificar factores genéticos o ambientales que puedan contribuir a una mayor longevidad canina.
Ahora han publicado los resultados de un estudio realmente interesante en el que han analizado la relación entre la frecuencia de tomas alimenticias y la función cognitiva en los perros y otros aspectos relativos a su salud.
Los datos son muy sorprendentes pero, como insisten los propios científicos, hasta que no haya nuevos estudios, más exhaustivos, no sería recomendable modificar la forma en la que actualmente alimentas a tu perro.
Tras analizar datos obtenidos en encuestas a 24.000 dueños de perros y con datos de más de 10.000 canes, The Dog Aging Project ha descubierto que los perros alimentados solamente una vez al día tienen menos probabilidades de ser diagnosticados con afecciones relacionadas con la edad que los perros alimentados con más frecuencia.
Teniendo en cuenta el sexo, la edad, la raza y otros posibles factores, resulta que los canes que solamente comen una vez al día tienen menos probabilidad de sufrir disfunción cognitiva y también menos probabilidad de sufrir problemas gastrointestinales, dentales, ortopédicos, renales / urinarios y trastornos del hígado / páncreas.
En conclusión, según los científicos de The Dog Aging Project dar una sola toma de comida al día se traduciría en una mejor calidad de vida para los perros según van envejeciendo.
Aún así, explica uno de los responsables del estudio, Matt Kaeberlein de la Universidad de Washington, este estudio no ha establecido la causalidad puesto que, por ejemplo, el factor clave podría ser la cantidad total de alimento que come un perro en vez de la frecuencia con la que es alimentado.
Igualmente, es de sobra conocido que los perros obesos tienen muchos más problemas de salud y quizá aquellos canes que reciben dos o más tomas de alimento al día tienen más probabilidades de serlo, algo que el actual estudio no ha tenido tampoco en cuenta.
Por eso mismo habrá nuevos estudios en los que sí tendrán presentes estos factores.
Our new paper from the @DogAgingProject is out this week in @GeroScienceAGE! Using data from >10,000 dogs, we found an association between feeding frequency and several health outcomes. A 🧵on what we can (and can't!) say about our findings. 1/7 https://t.co/5yT6aF0kmb
— Emily Bray (@DrEmilyBray) April 29, 2022
Es decir, dadas las limitaciones de este estudio, los resultados no deben usarse para tomar decisiones sobre la alimentación o el cuidado clínico de los perros. Solo si futuros estudios lo respaldan entonces podría ser útil revisar la recomendación predominante en la actualidad de que los perros adultos se alimenten dos veces al día.
Además, es importante recalcar que por mucho que se hable tanto sobre diferentes dietas que en teoría mejoran la salud o longevidad de las personas, ninguna está exenta de riesgos y ninguna es demostrablemente eficaz. Tal y como recientemente explicaban en El País, en un artículo en el que analizaban la literatura científica al respecto: comer menos para vivir más solamente sirve para animales de laboratorio.
La restricción calórica en personas sanas rebaja el riesgo de sufrir algunas enfermedades, pero podría generar otros problemas... Igual con los perros, agregamos: hasta que no haya datos y estudios concluyentes al respecto, antes de hacer ningún cambio en la alimentación de tu perro, por favor, consúltalo con tu veterinario.
Bottom line, we see this as an intriguing, hypothesis-generating 1st step, but more research is needed! Given the above limitations, this is NOT an endorsement on how frequently to feed your dog! (video: familiar sight to many dog owners - our dog 'yelling' for meal #2) 6/7 pic.twitter.com/2xC38RSNgm
— Emily Bray (@DrEmilyBray) April 29, 2022
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