Un millón de personas afectadas y más de 30 muertos: Florence, primero huracán y luego ya tormenta tropical, está causando el caos a su paso por la costa sureste de EEUU.Carreteras y campos totalmente anegados, ciudades aisladas, miles de millones de dólares en daños... La tormenta irá remitiendo en los próximos días, sí, pero las autoridades advierten que el peligro está lejos de haber pasado.
Un verdadero drama del que muchos tardarán en recuperarse.
La Guardia Costera de EEUU llegó justo a tiempo para salvar primero a los humanos y acto seguido a todos estos perros, una decena de Beagles que estaban a punto de morir ahogados.
En paralelo a la oleada de solidaridad también surgen imágenes que muestran el egoísmo de algunos humanos.
Estos otros seis canes también hubieran muerto ahogados si sus ladridos desesperados no hubieran sido escuchados por unas personas que eligieron ir a ayudar.
Un periodista, Marcus DiPaola, grabó el momento y lo compartió porque... no daba crédito que alguien pudiera huir de la tormenta dejando así a sus perros, encerrados y sin posibilidad de salvarse.
Menos mal que incontables otras familias están siendo rescatadas junto con sus canes, con ayuda de vecinos, voluntarios...
Incluso de los periodistas que están cubriendo la noticia. Esta reportera paró en medio de una retransmisión en directo para salvar a un can.
Y por supuesto, las protectoras se han movilizado en todo EEUU para echar una pata y sacar a todos los perros que puedan de la zona.
Muchos se han referido a este rescate -en un autobús escolar- como el Arca de Noé de los perros y gatos.
Un voluntario no dudó en conducir hasta la zona y sacó de allí a 64 canes y mininos.
