El Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil de Guadalajara (SEPRONA) está investigando un cementerio ilegalque se ha descubierto gracias a la denuncia de la protectora Amores Peludos.
En el alcantarillado de una urbanización en El Casar cuya construcción quedó paralizada hace años han encontrado los restos de al menos una veintena de perros: algunos dentro de sacos, otros esparcidos e incluso algunos decapitados (para evitar que pudieran ser identificados).
Los cadáveres de los animales habrían sido arrojados al alcantarillado en el interior de sacos, algunos decapitados para impedir su identificación a través del microchip. pic.twitter.com/I5AVkjajbq
— Guardia Civil Guadalajara (@GuardiaCivilGU) October 22, 2020
"Decenas de cadáveres se amontonan en las alcantarillas, muchos de los cuales no se podían ni juntar dado que los huesos estaban esparcidos por todas las tuberías de la zona", explican desde Amores Peludos.
Ellos supieron de la existencia de ese macabro lugar a través de algunos de sus voluntarios e inmediatamente denunciaron la situación para que las autoridades pudieran intervenir.
"Poco a poco vamos a ir poniendo nuestro granito de arena y vamos a luchar en contra del maltrato animal y de hechos como estos que por desgracia son bastante habituales."
Los agentes del Seprona han llevado a cabo la obtención de los datos de los animales y sus propietarios a través del sistema de identificación individual de animales de CLM (SIIA-CLM) para cursar las oportunas denuncias administrativas.
"Nosotros no miraremos para otro lado y apoyaremos a las autoridades en todo lo que esté en nuestras manos. Gracias a nuestro amigo Toni, policía local de Fuenlabrada quien nos ha ayudado con todo el trámite de la denuncia, orientandonos en todo momento con una gran profesionalidad y gracias a los compañeros del @seprona_gc por acudir a nuestra llamada de urgencia y por llevar a cabo los trámites para que esto no caiga en saco roto", concluyen desde Amores Peludos.
En la nota de prensa de la Guardia Civil explican que "todo indica que (el alcantarillado) se ha venido utilizando por numerosas personas como lugar para deshacerse de los animales domésticos muertos", pero resulta un tanto chocante, por no decir del todo increíble, que ningún humano perruno elija hacer eso con su perro.
No hace ninguna falta que la Guardia Civil nos recuerde que "los animales muertos deben ser tratados con respeto, nunca deben ser abandonados, póngalo en conocimiento de su ayuntamiento, de su veterinario o del Seprona y le dirán como actuar".
Todo indica, más bien, como también sugieren desde Amores Peludos o la Plataforma No a la Caza que ese macabro lugar pudiera ser una especie de fosa para perros de caza.
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