La transformación de esta perrina es increíble: como veréis, estaba extremadamente flaca porque no podía comer ni beber porque su cabeza había quedado atascada en un tarro.
Por eso era tan urgente conseguir rescatarla... Y las voluntarias de Boonie Flight Project entraron en acción.
Boonie Flight Project es una protectora que trabaja en Guam, una pequeña isla que forma parte de EEUU aunque está al sur de Japón, donde hay multitud de perros abandonados, canes llamados "Boonies", que son descendientes de los perros de raza que los americanos tuvieron en Guam durante la Segunda Guerra Mundial.
Así que lo que hace esta asociación es tratar de lograr adopciones en EEUU y para ello organizan vuelos charter especiales cada equis tiempo, de ahí su nombre: ya han logrado que 400 perros sean adoptados.
Winnie, como han llamado a esta afortunada perrina, es una de ellas: tras dos meses y medio en una casa de acogida, ¡Winnie por fin tiene su propia familia!
En este otro reportaje cuentan algo más sobre la historia de Winnie, antes de su adopción, sobre su rehabilitación en su casa de acogida, donde empezó a aprender a confiar y a ser una perra querida.
Y si entráis en las redes de la prote podréis ver el gran trabajo que hacen:
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