Hace tiempo os hablamos de John Bramblitt, un pintor ciego que crea unos espectaculares y coloridos retratos, muchos de ellos de su fiel compañera y perra guía, de Echo. Hoy compartimos otra historia relacionada, un vídeo que, seguro, os gustará.
Se trata, en teoría, de un anuncio pero está inspirado en una historia real, la de un pintor que perdió la vista y se hundió anímicamente...
En estas emocionantes imágenes podréis ver con qué ayuda logra volver a encontrar la energía y las ganas de vivir y de pintar. Os podréis imaginar que ese ayudante tiene trufa y muchos pelos :-)
Un ejemplo más de cómo los perros de asistencia logran cambiar la vida de los humanos a los que acompañan.