Este "truco" nunca falla, hace sonreír sí o sí a cualquiera que tenga perro. ¿En qué consiste? Pues en sorprender a un can que hace tiempo que no ha visto a su humano escondiendo a dicho humano dentro de una caja, como si fuera un regalo... Bueno, no es como si fuera un regalo porque lo es en realidad, ¡el mejor regalo para cualquier perro!
Aunque es una sorpresa de lo más simpática no está de más recordar que, como implica objetos voluminosos extraños -humanos dentro de una caja- hay que tener en cuenta que puede asustar a algunos perros.
Hay alternativas, como ocultarse bajo una manta en vez de dentro de una caja. O salir antes, como aquí, para pasar directamente al momento feliz sin asustar innecesariamente al perro.
Sandy ahora vive con los padres de su humana: ella ha tenido que irse a EEUU pero volvió a casa en vacaciones y entonces planearon esta sopresa para el can... ¡que pierde los papeles de lo feliz que está con su regalo!
Quizá os recuerde a otros vídeos que compartimos hace tiempo, los protagonizados por un educador canino, Nando Brown, y sus canes.
Y otro momentazo más, el clásica regalo navideño humano, al ladito del árbol :-)
Si es que está claro, para tu perro, tú siempre serás el regalo más feliz.
