Normal y comprensible que haya psicosis entre los dueños de perro en Logroño. Varios canes han muerto ya y este fin de semana se han vuelto a producir dos nuevos envenenamientos, aunque por fortuna ambos perros parece que se están recuperando.
De nuevo en un parque, esta vez en Los Lirios: un Galgo llamado Scooby y una mestiza llamada Luna, están ingresados en diferentes clínicas veterinarias tras haberse comido sendos cebos envenenados.
La alerta rápidamente ha saltado en las redes sociales y desde APA La Rioja han pedido máxima colaboración y alerta.
Entre tanto, ayer la policía peinó la zona -con ayuda de vecinos y dueños de perro- y han encontrado otros cinco cebos.
Son, explican desde el ayuntamiento, cebos de carne procesada de color blanquecino que contenían gránulos de color negro de un milímetro con los que se cree han sido envenenados dos perros.
La Policía Local ha enviado a analizar las muestras recogidas y ha recomendado a los propietarios de los animales afectados que denuncien lo sucedido ante la Policía Nacional.
Desde el pasado mes de julio, cuando se produjeron los envenenamientos mortales, la Policía Local realiza seguimiento semanal en los parques y zonas ajardinadas de Logroño para detectar cebos envenenados dirigidos a perros y, desde la semana pasada, agentes de paisano refuerzan esta vigilancia, confirman desde el consistorio.
Es un suma y sigue muy, muy preocupante, dramático y triste: llevan más de un año así, con perros afectados, perros que han muerto porque hay uno o varios desalmados sembrando Logroño de veneno.
Ahora se han organizado también patrullas vecinales para intentar evitar nuevos casos.