Seguro que os habrá pasado en más de una ocasión, sobre todo cuando hace frío o cuando llueve, pero también cuando uno está en modo vago total, o de resaca, o con dolor de cabeza o... en fin, hay incontables excusas... Tú en el sofá, haciendo zapping, y tu perro mirándote fijamente, casi tanto como cuando espera conseguir algo de comer, hasta que, por fin, ante su insistencia, optas por salir a dar una vuelta. ¿El resultado? ¡Muchos, pero muchos paseos maravillosos por el parque, por el campo, la ciudad o la playa! Incluso... alguna que otra ruta de tapas y cañas después :-)
Es parte de la filosofía perruna: si puedes correr y disfrutar del día al aire libre, ¿cómo te vas a quedar dentro de casa? Tu perro, desde luego, no lo entiende :-)
Por eso es tan buena idea dejarse contagiar por la energía y la felicidad perrunas. Ser más perro cambia la vida hasta de los gatos, ejem, al menos en la publicidad.
Este simpático anuncio de Subaru lo demuestra a la perfección y con una estupenda banda sonora.
Los humanos se enganchan a sus maquinitas variadas y se olvidan de lo que tienen a su alrededor. Los perros no, menos mal que están ahí para recordárnoslo y hacernos disfrutar.