A esta pequeña caniche la encontraron en el sótano de una granja de cachorros. Ahí, en una jaula, parecía haber pasado la mitad de su vida: no saben cuántos años tiene pero sí saben que ha tenido una camada tras otra. No sabía lo que era correr por la hierba o disfrutar del sol... hasta ahora.
Miembros de la Humane Society de EEUU desmantelaron una granja de cachorros en Carolina del Norte. Allí encontraron a más de 150 canes y otros animales, todos en un estado penoso.
B.B, como han llamado a esta pequeña, ya ha sido adoptada y poquito a poquito está aprendiendo a disfrutar de la vida: ya sabe lo que es corretear por la hierba y elegir sus juguetes, está descubriendo el cariño de los humanos y la compañía de otros canes...
La pobre perra, cuenta su dueña, se llevaba a algunos peluches a la cama y los lamía y lamía, como si fueran sus cachorros... esos que le han ido quitando a lo largo de los años.
Menos mal que ya está a salvo.
Para evitar perpetuar el negocio de la venta de perros, la cría indiscriminada y el maltrato, como el sufrido por B.B., lo mejor es optar por la adopción.
En caso de querer comprar un cachorro, nunca se debe comprar por internet, también en España existen las granjas de cachorros... Lo responsable es visitar al criador para ver cómo cuida a los canes, para poder conocer a la madre del cachorro.
