La Semana Nacional para la Prevención de las Mordeduras Caninas se celebra en EEUU en abril. Durante esos días muchos profesionales, incluyendo la AVMA (Asociación Veterinaria Médica Americana) o la ASPCA comparten consejos, charlas y todo tipo de información para concienciar sobre lo mucho que podemos hacer para evitar que un perro llegue a morder.
Hay multitud de momentos en los que NO es buena idea acariciar a un perro:
La educación en familia es primordial puesto que la mayoría de mordiscos se dan en casa o por parte de perros conocidos y a niños pequeños.
Los perros pueden morder por muchas razones, incluido el cuidado inadecuado o la falta de socialización. Todos los perros, incluso los más amables o bien educados, son capaces de dar un mordisco cuando se les provoca, especialmente cuando comen, duermen o están cuidando a sus cachorros.
Los casos de mordeduras a niños son motivo de especial preocupación. Más del 50% de todas las lesiones relacionadas con perros ocurren en niños, y en el caso de los menores de cuatro años, esas mordeduras suelen ocurrir en regiones vulnerables de la cabeza y el cuello, por lo que es tan importante nunca dejar a los niños sin supervisión si están con un perro, incluso si es el can de la familia.
- Asegúrate de que tu perro esté sano.
No todas las enfermedades y lesiones son obvias, y es más probable que los perros muerdan si están enfermos o sienten dolor. Si no ha ido al veterinario desde hace tiempo, programa una cita para un chequeo para analizar la salud física y conductual de su perro.
- Prioriza la socialización adecuada.
La socialización implica presentarle gradualmente a su perro una variedad de entornos, personas y otros animales, y garantizar que estas experiencias sean positivas. Ya sea observar tranquilamente el bullicio de un parque, conocer gente nueva de manera controlada o acostumbrarse a las vistas y los sonidos de su vecindario, cada experiencia positiva genera confianza. Recuerda, la socialización es un viaje que dura toda la vida, no solo una fase de cachorro.
- Mejor ir sin prisa, paso a paso
Si tu perro solo ha tenido relación con la familia dessde que llegó a casa, no te apresures a ir zonas muy concurridas o parques para perros. Intenta exponerles a situaciones nuevas con calma, poco a poco y durante periodos cortos de tiempo. Organiza interacciones sin estrés y fíjate en cómo se comporta tu perro, identifica cuándo está cómodo y felis de permanecer en ese sitio / situación.
- Entiende las necesidades de tu perro y aprende sobre técnicas de educación en positivo.
Aprende a reconocer el lenguaje corporal de tu perro y protégelo en toda situación. Esto le dará a tu perro las habilidades que tanto necesita y le ayudará a superar cualquier desafío que pueda encontrar.
- Sé respetuoso al acercarte a los perros de otras personas.
Pide permiso al tutor de un perro antes de acercarte al can. Fíjate en el lenguaje corporal del perro, busca señales de que ese animal quiere interactuar contigo antes de acercarte. A veces los perros quieren que los dejemos en paz y debemos reconocerlo y respetarlo.
- Asegúrate de pasear a tu perro con correa y sé consciente de cambios en su lenguaje corporal que puedan indicar que no está cómodo.
- Vigila siempre la actividad de su perro, incluso si está en tu jardín en casa, algo puede asustarlo y hacer que salga de ese espacio y podría herir a alguna persona o lesionarse.
- No acaricies a los perros si están comiendo o durmiendo y nunca juegues a quitarles su comida o sus juguetes. Respeta su espacio y sus momentos de descanso. No inicies juegos en los que haces ver que vas a pegar a un perro.
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