No es anecdótico, se ha comprobado que los perros pueden ser entrenados para detectar el cáncer con una efectividad del 90%(más alta que la de muchas pruebas tradicionales);también hay múltiples ejemplos de canes que -sin ningún tipo de adiestramiento- son capaces de alertar a sus humanos de que algo no va bien y aquellos que logran entender el mensaje.
Con esa ayuda canina se puede detectar un cáncer antes y de manera menos intrusiva que con otros métodos, dos cuestiones realmente clave cuando hablamos del cáncer puesto que según la OMS, la detección temprana de un tumor podría reducir la mortalidad en un 50%.
También en España se está entrenando a perros para detectar el cáncer, dos Golden Retriever llamadas Nel y Dana son las primeras.
¿Cómo es posible? Lógicamente, igual que en el caso de los perros que ayudan a detectar cambios en los niveles de azúcar, esta capacidad de alerta está directamente relacionada con el olfato canino.
No se sabe exactamente qué es lo que huelen, es decir no sabemos a qué huele el cáncer o la diabetes, pero sí hay algunas claves al respecto.
Para entender mejor cómo es el proceso, traducimos aquí parte de la respuesta que ha dado en Quora Adriana Heguy, bióloga molecular e investigadora:
Las células cancerosas son generalmente más activa metabólicamente que las células normales por lo que esta es una situación ideal para detectar una alteración del metabolismo. Algunos de estos metabolitos son compuestos orgánicos volátiles (COV) y están presentes en el aire exhalado, las heces (en el caso del cáncer de colon, por ejemplo), también en la sangre, la orina, el sudor o la piel.
Los perros, gracias a su impresionante capacidad olfativa, pueden detectar estos compuestos orgánicos volátiles. Y pueden ser entrenados para detectar diferentes tipos de cáncer, al igual que se puede entrenar a un perro para olfatear drogas en los aeropuertos o dinero o chinches o trufas.
¿Cómo? Pues resulta que los diferentes tipos de cáncer producen diferentes compuestos orgánicos volátiles.
Por ejemplo, el cáncer de colon produce alteraciones en la flora intestinal y según un estudio llevado a cabo en 2010 para tratar de encontrar métodos de diagnóstico temprano de esta enfermedad, la eficacia de la detección canina de muestras de aliento en comparación con el diagnóstico convencional mediante la colonoscopia fue de 0,91, con muestras de heces alcanzó el 0,97.
En el Reino Unido están llevando a cabo un estudio pionero gracias a una colaboración con Medical Detection Dogs, la organización que dirige la Dra. Claire Guest.
Ella misma vivió la experiencia de que su perra le detectara un cáncer que hubiera sido muy complicado de detectar de otra manera. Ella tiene claro que le debe la vida a Dasy, a su perra.
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Desde entonces, Medical Detection Dogs ha entrenado a perros para detectar todo tipo de enfermedades y diversos tipos de cáncer. El entrenamiento es siempre muy similar, como podréis ver aquí.
Hace un par de años la BBC compartió este reportaje en el que nos cuentan cómoun perro -en este caso sin ningún tipo de entrenamiento- fue capaz de salvar la vida de su dueña.
Max, su perro, detectó un cáncer que había pasado desapercibido para los médicos que le habían hecho una mamografía a Maureen. Realmente impresionante.
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